viernes, 8 de agosto de 2008

Desde "YO SOY TU ALIMENTO Y TU FORTALEZA"

Mis hnos. y hnas.Siento hoy un día decisivo que me impulsa romper barreras, dificultades de toda laya en estos tiempos y que han sido costoso vencer. Una y otra vez hecho el intento de compartir me han fracasado por uno u otro motivo y fui dando tiempo al tiempo al compartir los pasos de Dios por mi vida. Al retomar el compartir siento que brota en mí inmensa alegría por el reencuentro en esta página, se desahoga y descansa profundamente mi añoranza en el Espíritu con gratitud al Señor. Contemplo, admiro y alabo al Señor por los compartires de cada una que en el silencio de la distancia hicieron posible que me sintiera en comunión en el mismo Espíritu aún cuando parezca egoísta y muda en el silencio de esta misión marcado de gozo y de la fuerza de lo costoso y doloroso.
Han transcurrido bastante desde mi último compartir en la página, y al retomar nuevamente recogiendo momentos claves de los pasos de Dios por mi vida con referencia a experiencias vividas, el Señor no ha cesado de manifestar su amor y compasión por mí y en mí, y que se tornó para mí manantial en donde me siento conducida a ella en mis horas plenas y en mis horas de fragilidad.
Con gran sed e ilusión de un espacio de silencio y soñando que se sacie mi sed en el encuentro personal con el Señor con retiro personalizado confirmado para enero, partí en diciembre para Paraguay. Llegado el día una confusión en la comunicación vía telefónica me daba la sorpresa inesperada al llegar en Santos Mártires: se trataba de un taller sobre la Eucaristía, y mis planes , sueños, ilusión cayeron por tierra. Tentaciones no me faltaron, pero un movimiento interno me impulsó a acoger con fe y abandono para lo que El disponga de este tiempo, con el pensamiento en que el Señor saber lo que hace, yo no entiendo pero lo acojo en fe y el Señor me regaló una gran paz.
Me sentí llamada a acoger como primer gracia y así quiso mi Dios percibir que viene a mi encuentro al sentirme estremecida al pisar la tierra sagrada de Santos Mártires, regalándome revivir las gracias regaladas en mi retiro de mes, sintiéndome en profunda intimidad con mi Señor, en encuentro gozoso amoroso y compasivo, y a cuatro años luego del discernimiento-confirmación realizado y finalmente acogido en fe el Proyecto propuesto de Misión Ad-extra. Gozo, estremecimiento, lágrimas no se contuvo en mí al contemplar que El no cesa de tejer su historia de amor y compasión por mí y en mí. La experiencia de revivir y sentir recreada en mí la consigna final: Lleva mi abrazo de amor y compasión por donde te envíe, entrégalo a todos sin excepción. Desde esta vivencia renovada, recreada en mí inicio con el taller Eucarístico con otro tinte de sorpresa amorosa: El sentirme esperada por mi Señor: Teresa, "Ardientemente he deseado compartir contigo este momento". Hondamente sacudida y asombrada, una profunda impotencia siento que se adueñó de mi ser, y fue creando en mí una profunda actitud de abandono y disposición para lo que El quiera conmigo. Este ha sido el sello que dejó en mí: El regalarme contemplar que El continúa dejándose transpasar el Corazón en la Eucaristía. Dejarme contemplar su Corazón abierto, entregando todo sin reservarse nada para sí, con amor radical por la humanidad, por mí. Esta ha ido calando en lo profundo de mi ser con como el agua que empapa la tierra suavemente, en el silencio que El dispuso en mí por pura compasión (porque sabe de mi sed) e hizo brotar en mí un deseo profundo de corresponder a su llamada desde el sentirme y saberme amada en la radicalidad de su amor y compasión. En más ha ido marcando el ritmo de mi vivencia cotidiana, en medio de tentaciones de racionalizar la experiencia; han sido de ayuda clave para este tiempo"Al Ritmo del Espíritu; me ha confirmado no preocuparme de cómo, cuándo, donde, con quién; el obrar es de El, El se da, El conduce, El hace. El compartir de Carlos de la Cruz ,"Había sido que el Señor habla", una gran Revelación del misterio de Dios, me ha ayudado esclarecer, confirmar la llamada a vivir desde la Identidad regalada a la vida consagrada. Me ayudó a desnudar que en mi discernimiento aún con convicción de que es desde El y desde la paz, sin embargo se esconde sutilmente una reserva que se acomoda a mis determinaciones personales y condiciona mi entrega , mi amor al estilo de Jesús,:"AMOR RADICAL, SIN RESERVA ALGUNA". Esta es la hora en que experimento que mi Señor a entrado a tocar con mucho amor y compasión mi reserva egoísta y siento que que me ha sanado, me ha liberado que aún en mis debilidades me siento más libre para su amor. Me ha regalado vivir en gozo su ternura, su amor, su compasión, también me ha regalado vivir en clave de la radicalidad de su amor, y experimentar como bálsamo en momento de de injusticia y humullación, experimentar mi fragilidad y mi impotencia clamando sea El mi fortaleza y por pura compasión, me sorprende en momento de Consagración Eucarística:Teresa, Estoy en tí con el Corazón transpasado, No temas, Soy tu alimento y tu fortaleza, Yo me entrego en tí. Y esta es mi certeza hoy en la travesía dolorosa, hecha de humillación, y despojo pero El es mi Bálsamo en este caminar. En el Amor fiel del Señor un gran abrazo. Teresa Inés.