“Mientras tengan la luz crean en ella y serán hijos de la Luz”

Estas palabras de Jesús me fortalecen en la fe y en la esperanza. Cuando la obscuridad es grande la luz alcanza su mayor grandeza. Le pido al Señor la gracia de acoger su misterio pascual en este rincón de Egipto.
De vuelta estos últimos cuatro días han estado marcados de violencia y muerte. Mas de 1.700 heridos y cerca de 28 muertos, la mayoría jóvenes.

Contamos con sus oraciones, hoy será un día difícil, la plaza Taharir volverá a llenarse de gente que se prepara para una segunda revolución. Hay una gran insatisfacción con el consejo militar, quien dirige el país y continúa utilizando medios de represión inhumanos.
El ambiente es de preocupación y tristeza. Las elecciones parlamentarias programadas para la semana próxima posiblemente serán aplazadas…

María nos acompaña dándonos ánimo y coraje en este caminar de mucha obscuridad.

Abrazos
Fide

Perdonanos Señor

Querida CAF en dispersion

En estos días intento recoger lo vivido desde la fe y lo primero que me aparece en mi mente y en mi corazón son los rostros y cuerpos de gente que han sufrido la tortura y la muerte.

Hace 15 días hemos sido testigos del dolor de tantas familias que han perdido a sus hijos, maridos, parientes... durante la manifestación de los coptos en el Cairo. Nos llegan imágenes muy duras de la violencia en Libia, Siria y Iemen, los atentados en Irak, Pakistan y Afganistán, la constante tensión y lucha entre palestinos e israelítas. De un lado de Egipto Libia y del otro lado Gaza, desde el sur se siente el problema entre Sudan norte y Sudan sur . Y en Somalia continúa la muerte de miles de niños por falta de alimento.

Este ambiente es el que respiramos un día y otro día, en medio de traiciones y venganzas entre grupos religiosos extremistas, tribus de corrientes radicales, culturas y paises enfrentados.

Nos preguntamos por qué, por qué... todo este odio, violencia y muerte... ? y nos llega una brisa suave como respuesta: "donde abundó el pecado abundó la gracia".

Y finalmente nos queda decir desde lo más profundo de nuestro ser: "perdónanos Señor"

Unidos en un mismo Espíritu.

Abrazos

Fide

Gracias Padre por mis Hermanos (as) !!

" Mi alma canta la grandeza del Señor y mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador" ( Lc 2 )
Mis queridos hermanos (as) : CAFA, CAF en dispersión, el día 10 de Septiembre voy a celebrar, unida a Jesús , mis Bodas de Plata de vida religiosa. La siento una gracia especial del Señor. En estos momentos brota en mi corazón un decir GRACIAS PADRE, JESUCRISTO Y ESPIRITU SANTO!, por su amor fiel conmigo, por cuidarme, por rescatarme continuamente. Cuántas gracias me ha ido dando durante estos años. Una de estas gracias son ustedes mis queridos hermanos (as): Carlos, muchas gracias por tu gran ayuda, acompañamiento en mis procesos, por ser un instrumento dócil y fiel del Señor. Mis queridos hermanos (as) muchas gracias porque han sido un valioso instrumento del Señor en mi vida religiosa, por medio de ustedes Jesús me ha ido orientando, animando y dando luces en mi proceso.
Qué rápido pasan los años!! ya llevo peregrinando unida a Jesús, unida a ustedes ocho años. Sé que ese día 10 estarán presente, estaremos unidos en la Eucaristía . Dios me hace experimentar la "gracia de la comunión con cada uno de ustedes", esta es una gracia muy grande, muy profunda, esto es otro regalo del Padre. También me concede experimentar la comunión con Etel. Les agradezco enormente sus oraciones!!
Desde Filipinas, les saluda con gran cariño en Jesús:
hna. Mónica

ENCUENTRO CAFA, JULIO DE 2011

Recogida del compartir de la primera interiorización

Iniciamos nuestro encuentro con la liturgia de la Palabra dentro de la Eucaristía, luego nos damos un tiempo largo de oración personal recogiendo las gracias recibidas en este tiempo. A las 11:00hs. con el canto “Tomad Señor…” compartimos en el ofertorio nuestra vivencia, reconociendo el camino que el Señor nos ha concedido peregrinar...

Lichi: al ir orando en estas semanas el folleto experimentaba la moción de acogida, disponibilidad interior, reconocerme criatura con un anhelo profundo, sentido del Señor en mí, removiendo mi interior como quien prepara la tierra. Acoger con confianza la gracia pendiente de sujeto CAFA en mi, cuando oro, participo de los encuentros me experimento en comunión, en sintonía, cada mes es un retomar el proceso de divinización a nivel personal, con facilidad me distraigo en mi proceso. Contemplar el itinerario que el Señor ha ido viviendo en nosotros, asumir la iniciativa soberana del Señor en la CAFA haciéndonos participar de su Santidad, agradecer por esos anhelos profundos que sólo Él conoce y conduce… Acogida, paz, confianza.

Carolina: me sentí muy unida a María al recoger en la oración nuestro proceso CAFA. Resonaba mucho en mí la expresión de María “engrandece mi alma al Señor”, al experimentar sentimientos de pequeñez, de sobrecogimiento ante la grandeza de Dios, admirando su pedagogía maravillosa con la CAFA. El Dios Santo, el TODO OTRO como en la zarza ardiente en esta primera interiorización, ha impactado fuertemente a la CAFA con la manifestación de su SANTIDAD, que por la fe empezamos a asumir de manera personal aunque con la conciencia de lo que estábamos vivenciando era un momento nuevo. La Escuela de Santidad empezaba a tejerse, empezábamos a consensuarnos en el Sentir y por aquí el Señor nos fue constituyendo comunidad en un lento proceso de desapropiación en primer lugar de nuestra propia persona y de todo aquello en lo que nosotros habíamos puesto nuestra seguridad. La CAFA como María ha venido meditando rumiando agradecida, las gracias recibidas en el corazón. Y en el día a día el Señor fue constituyéndose por su Espíritu: CENTRO, y VIDA de esta comunidad. En él aprendimos y experimentamos la comunión con su Espíritu y entre nosotros. (Yo llegué sólo hasta el punto 3) agradeciendo y en sobrecogimiento por la divinización que en su persona ha obrado en la CAFA.

Cristino: vivencia muy profunda, ya me introdujo esta vivencia en María, con el Evangelio, de ahí con María, estar con María un primer momento. Guardar todo en el corazón, volver a Galilea, hacia la familia, donde el niño crecía. María en silencio, sobrecogida, la vivencia del corazón. Sentía la necesidad de centrarme en el silencio, en el corazón donde todo entra en silencio, me quede largo rato con María. Leí el folleo, desde ahí sentirme CAFA, en mi interior, ver en mi interior a cada uno como se fue asentando en nosotros la vivencia. Vivir el sobrecogimiento, el silencio, actitud ante el Todo Otro, por ahí nos fue llevando… nos ubica, un estilo de vida que va siendo nuestro, nuestra relación con Dios, el silencio, el respeto. Por ahí sentía la relación más allá con nosotros, no va en cosas concretas, una relación más espiritual entre nosotros, de paz, de armonía. Nos ha introducido por pura gratuidad. El primer punto producía mucha sintonía, confirmaciones personales y como CAFA. Me quede mucho tiempo, una experiencia que tuve con 12 años, el bosque grande, 12 horas caminando en el bosque, adentrándonos, sentir el bosque. A medida que vamos entrando, no preocuparse, sentir la frescura, el olor, gustar, disfrutar, el vivir desde ahí. Momento de mucha consolación. Me quedé en el primer punto del 2005.

Laura: me costó centrarme, veníamos hablando con Diosnel sobre la comunión como pareja, post EE de Norma. Sonrisa de Etel, comunión. ME quedaron lo que yo recogí como movimientos espirituales, no estuve en esa interiorización, me pareció que el Espíritu nos envolvió en una experiencia… sentirnos cuerpo, brisa espiritual, gracia acogida, santidad desde el amor gratuito y la comunión nos sobrecoge, opción preferencial de Dios por nosotros, signos de deseo interés por el todo Otro. Creer en la fragilidad del hermano, la fe como camino de santidad. Misterio de Dios, podíamos mirar que es lo que hizo que sea más vida en nosotros ese misterio: tres medios, el despojo, la ida de Carlos, nuestros hermanos en la dispersión, la ausencia de Etel, la ausencia de algunos miembros de la CAFA en los votos de Ili y Marisa. La comunión, sobrecogernos, si Señor caminamos desde la impotencia, porque la CAFA no sabe. Escucharle luego a la CAFA en la experiencia de Norma y Cristino. Agradecimiento grandísimo, no tenemos nada más que decir Señor, esta es tu obra en nosotros. Lenguaje del amor.

Diosnel: sentí mucho, expresé poco. Desde el momento que nosotros tuvimos nuestro encuentro como CAFI, me fui a leer, lectura meditada de todo el folleto. El Señor nos regaló a través de P. Carlos los 10 puntos. Varios momentos de la lectura he parado para gozar del profundo amor de Dios por la CAFA, el esfuerzo humano por peregrinar no nos llevaba a ninguna parte. Nos enseñó el despojo de nuestras expectativas, de nosotros mismos, a través de la fe, la CAFA se sometió desde la fe, nos enseño la humildad, la confianza en Él, basta para que nos conduzca hacia la santidad. Siendo Cristo quien peregrina en nosotros, no por nuestro mérito, la gracia de la CAFA es puro amor gratuito, todo proviene de Él, Dios ama la CAFA, Dios nos ama. Nuestra vida con Laura es fruto de ese regalo de amor de Dios, ha obrado maravillas en nuestra vida y como CAFA.

Fátima: contemplar la peregrinación de María como familia, la peregrinación de la CAFA en fe, reconoce a Dios que es su Dios, Dios en su misericordia hace que la CAFA sea santa, El misterio es que la CAFA exista por decisión de Dios, es el mismo Señor de la Creación que se ha encargado de hacer nacer a la CAFA en su libertad soberana. En esta peregrinación en la fe se va construyendo esta escuela de santidad, la fe de la CAFA hace posible que asuma la santidad de Dios y estar escondido en su corazón. Las resonancias personales son vivencias de cada sujeto que deja ser conocido por el resto, pero la fe unificada hace posible reconocer el misterio escondido de Dios en la CAFA. Otra cosa que me llama a atención en la peregrinación del a CAFA es que el Señor pedagógicamente va trabajando en cada sujeto y moldeando a su gusto sin estropear su obra en la CAFA. Sólo el amor divino de Dios puede actuar de esta manera en nuestras vidas. Doy gracias al Espíritu, la CAFA existe porque Dios permite que exista, dar gracias por esta creación que ha hecho en nosotros por su hijo Jesús.

Reina: sólo leí hoy el folleto, me venía la experiencia vivida por la CAFA, muy denso, sentir que hay una vivencia, un proceso de fe que se va haciendo, hay mucha sintonía, resonancia, invitaciones a adentrarme en eso: “Moisés va a poder captar el borde del manto”, para mi es esa la experiencia, posibilidad de adentrarme en esto. Agradecer mucho al Señor, experiencia nueva y no tan nueva, que Dios va haciendo en mi proceso, es pura gratuidad del Señor.

Emi: mucho agradecimiento al Señor, la gracia mayor que acogíamos era ese sobrecogimiento ante el todo Otro, lo hacíamos personalmente, hoy ya no personalmente, sino como CAFA, toda la comunidad acogiendo en fe, al que pertenecemos. La gracia fue viviendo nuestra identidad, no ser nada, mucha confirmación, actitud serena, no buscando que hacer, ser lo que Dios quiere que sea escuela de santidad. Confirmada en esta experiencia, de que Dios está en nosotros y nosotros en Dios, sentir a Dios en la CAFA y nosotros en Dios. Impulso interior, experiencia de ser habitadas, nuevo movimiento, camino, dejar obrar al Padre, nueva experiencia de ser habitadas en Cristo. Pasitos, agradecimiento, fundamentales.. oración en fe, la comunidad donde estemos Cristo sea su sujeto, es gracia y camino que el Señor fue haciendo en nosotros.

Digna: yo fui rezando en este tiempo el folleto, al recoger ahora me daba cuenta que de nuevo me metió en todo lo que es el proceso personal, eso justamente es lo que nos costaba mirarnos como sujeto CAFA, el Señor al final nos dio esa gracia. Recoge nuestro caminar, con Gen 4, agradecerle por tantas gracias y don recibido, cada parada que hemos hecho como CAFA, ha sido de recogida, agradecimiento, donde nos daba nuevas gracias, interiorizaciones, encuentros, regalo para seguir peregrinando. Gracias del amor gratuito, despojo de personas, escuela de santidad, ser enviados como CAFA, comunión en el Espíritu, conduciendo a la comunidad, le ha dado lo que necesita en cada momento y la CAFA camina, vive confiada en su Dios quien la creó. Momento de mucho agradecimiento al Señor por este momento de poder mirar el caminar y de recoger su paso en nuestra vida como CAFA. Me venía mucho, me tocaba el ser habitadas, que Cristo habita en nosotros, esa luz no podemos guardarla para nosotros, tiene que iluminar a otros, allí donde estemos. Me venía mucho en cada uno en nuestra misión, donde estemos tiene que pasar esa vivencia a nuestros hermanos, transparentar esa Luz que es Cristo. Agradecerle a Dios por sentir a la comunidad llevada por la mano de Dios, conducida por Él. Sentir una comunidad muy amada por Él y llevada por su mano.

Iliana: sentía como los viñadores de última hora, en todo sentido… en el camino sentir la alegría profunda de ese gozo esponsal de sentirme sujeto CAFA, desde ahí fui ahondando en esta gracia, al leer el material sentir que todos mis hermanos estaban rezando. Gracia grande que se le ha dado a la CAFA es experimentarnos sujeto CAFA, más allá de lo que es cada uno, incluso como comunidad congregacional, gracia de acoger ser sujeto CAFA. El sujeto CAFA que vive admirado, sobrecogido. Dejarme llevar por ese gozo profundo, alegría, no poder captarle a Él en su totalidad, sentirme gozosa en Él.

Teresita: me costó entrar en oración, pedirle el auxilio a María que desde su corazón, la CAFA recoge con mucha humildad las gracias derramadas en su corazón. Comunión con todos los hermanos, gracias recogidas en su corazón: la CAFA como escuela de santidad, esta es su identidad donde se siente pequeña, necesitada de ir aprendiendo en el día a día de manera vivencial la santidad de Dios. Ante el misterio inagotable del Dios Santo, la CAFA encuentra su lugar en el hueco de la roca donde se sobrecoge, dejándose invadir por la santidad de Dios sin entender nada, sintiéndose atraída por este misterio. La CAFA invitada a vivir en una actitud permanente de sobrecogimiento, de pequeñez, abandono, despojo de sus propios proyecto para adherirse al proyecto de Dios… permanecer abierta a la novedad de Dios en el día a día, recuperar el asombro de los niños en nuestra propia vida, en la de la CAFA y la de nuestros hermanos y toda la creación. Descubrir y asombrarnos ante el gran misterio. No solamente leyendo el material y los encuentros, esa actitud de María, actitud permanente, figura del niño, con todo su ser la invitación a la CAFA, recuperar esa capacidad de asombro ante ese misterio, ante esa santidad, que nos invita al sobrecogimiento, sentir nuestra pequeñez y nuestra nada.

Norma: Agradecerle a cada uno sus oraciones… Soy CAFA, ya como vivencia, gracia de estar en esa comunidad ya conformada, sobrecogimiento ante el Misterio del totalmente Otro. Pequeñez, sobrecogimiento, experiencia de Job, Sólo Dios es santo, su misterio es inagotable, no entender con la cabeza, llamado muy fuerte, vivir ese sobrecogimiento ante el todo Otro-Amen. Solo Dios conduce nuestra vida, somos una comunidad apostólica bajo la mirada atenta de la Trinidad. Rehabilitación de Dios, que recrea y crea.

Continuamos con la Eucaristía, luego nos dejamos sentir en el corazón que es lo que queda en nosotros, recoger en el corazón todo lo que escuchamos, ese obrar de Dios en cada uno y como comunidad.

· Lichi: experimento acogida interior, la confirmación de la experiencia de ser configurados como sujeto CAFA.

· Fati: realmente podemos captar la obra de Dios una vez que le abramos el corazón, obra como quiere y cuando quiere, la CAFA es obra de Dios, más allá de las personas, fue el señor que en la peregrinación reunió y la constituyo CAFA, y hoy podemos decir que la CAFA es un querer de Dios

· Diosnel: paz, certeza que Cristo en cada uno de nosotros

· Ili: alegría, serenidad, agradecimiento profundo por esos rasgos de la santidad de Dios, la CAFA lo va acogiendo, mucha gracia, nos abre a lo que pueda seguir llegando del Señor.

· Emi: confirmación, realmente Dios nos fue configurando como CAFA, la gracia en si lo vamos experimentando como ese sujeto comunitario, experimentando su amor, misericordia. Confirmación de estar en un tiempo de serenidad, de acogida profunda, de vivirnos desde la fe.

· Digna: agradecimiento al Señor la mirar su paso por la vida de la comunidad, sentirme en cada compartir reflejada, lo que yo no puedo decir o expresar, el otro me expresa, complementada, sentir a la CAFA llevada por la mano de Dios, en cada paso que Él quiere ir viviendo en nosotros.

ENCUENTRO CAFA, JUNIO 2011

Punto10: “LA FE EN EL HIJO CONDUCE A LA CAFA POR ETAPAS A LA VIÑA DEFINITIVA”.

Digna: “La santidad por la fe no es sólo para Abrahán, sino también para nosotros que por la fe somos hijos suyos”

Agradecida al Señor por su Palabra a la CAFA, la llamada a la santidad por la fe, la CAFA sólo acoge y se da, se entrega a su Señor para que haga en ella lo que es su querer, su voluntad.

Comunidad amada, comunidad que peregrina en la fe, en seguimiento de su Señor, junto con otros y otras.

Llamada a seguir desposeyéndose, despojándose de sí mismo para que Él sea todo en ella.

Comunidad que va aprendiendo de su Señor a vivir desde su Espíritu, dejándose conducir en el día a día.

La CAFA se siente sobrecogida ante tantas gracias que se entrega, en total confianza en su Dios y expresa su “HAGASE”: junto con María experimenta que no está solo en esta peregrinación, sino con Jesús y con María, junto con otros y otras que buscan a Dios y su querer en esta Escuela de Santidad.

Laura: No me fue fácil situarme como CAFA, quedé humanamente muy impregnada de las dos mamás de nuestra comunidad…en los procesos, en las etapas de la enfermedad, el cuerpo afectado por la realidad socioeconómica presente; dengue, infección intrahospitalaria, sin juzgar me unía a muchos…eran tantos casos, diciendo tantas cosas.

Entregamos como CAFA al Padre en Jesús a Fide, a Carmen, y todos y todas, agradecimos empequeñecidos la Grandeza de la Gracia de la fe; alfa y omega de nuestra existencia como CAFA, quedamos recogidos, en silencio y allí experimentamos profundamente la experiencia Pascual, la presencia del Padre en el Hijo; se rigen y su fin, el Amor hecho comunión entre ellos, y desde ellos para nosotros. La CAFA recibió esta herencia, fruto de antes de nosotros, no pertenece…claro que allí la CAFA encarnecidamente reconoce a la felicidad; cómo no dejar de asegurar o planificar; sí permanecer en esa experiencia de caminar en comunión, participando del interés de la Santísima. Trinidad, de volcarse hacia otros, nos dio participación y posesión de lo apasionante que es, estar en intimidad, convivir con ellos, desde esta vivencia de caminar juntos. Recuerda y reaviva la CAFA que los apremios, dificultades sólo la ejercitaron en la paciencia para andar en la esperanza y alegría a pesar de… La CAFA tiene la certeza de haber ingresado y andado en una experiencia de aprendizaje de ser amada y, por ese amor, andar amando; está y descansa segura que fuera de allí nada hay, que caminando en esa comunión nadie se separará, permanece segura en al Amor. La vivencia de comunión, de gratuidad, de interés por ella, la invitó, la convocó, y ella, por Gracia oyó, y está andando, caminando, lleva y refleja en sus pasos a donde vaya o esté, esa Presencia de Amor…La Santidad del Santo. La CAFA queda exaltada, agradecida, goza, sabiéndose regalada por la soldad experiencia de Amor, por gracia de la fe de Jesús en ella, que solo bató desearla y buscarla para tenerla. Permanece en silencio festejando su Felicidad, esperando a otros, CAFA para otros….

Diosnel: La reprimenda hace bien. Me quedé dormido. La última parcela por dónde apareció la fe en la CAFA. Queriendo mirar desde su nacimiento quedé dormido, gracias a la fidelidad de Dios, 1º quería la CAFA ir hacia destino de pura voluntad humana. Confiada en Jesús la CAFA empezó a peregrinar en etapas, el mayor regalo fue el Amor, desde esa gracia, la disponibilidad, la escucha, la obediencia, hizo que nuestra con unidad fuera escuela de santidad, aprendizaje en su seguimiento, apóstol, llevándonos a todas partes. Este regalo fue la fe, en El, en su hijo, nos dejó conducidos por El. Confiados en Jesús como cabeza de la CAFA. Sometimiento total, agradecimos por que El conduce este pequeño rebaño. Disponemos que sea Su Voluntad y no la nuestra. Gracias por la fidelidad donde aprendimos a Jesús como CAFA, hacia el Padre.

Reina: La fe es el verdadero camino para crecer en la santidad de Cristo. Al rezar con este texto me queda mucha paz, acogida al designio de Dios en la CAFA me queda resonando la frase, la fe es el verdadero camino para llegar a la santidad. Siento que Dios ha dado a la CAFA las gracias para vivir, esta experiencia de comunión por pura generosidad del hijo que nos amo primero. Una CAFA que cree y camina en constante búsqueda de la santidad camino de configuración me queda sintonía y acogida muy agradecida a Dios.

Teresita: La oración fue en comunión con toda la CAFA. Me surgió mucha gratitud por tantas gracias derramadas en esta vasija amada del Padre. Siento que el amor del Padre nos sostiene, nos une, nos compacta entre nosotros.

Y así sintiéndonos amados por el Padre le preguntamos: Padre, qué tenemos que hacer para que nos entregues a tu Hijo muy Amado y seamos coherederos con El?

El Padre con sencillez y claridad responde: CAFA, recibe, acoge lo que te entrego, lo que te regalo: Mi Hijo muy Amado. Te lo entrego para que lo vivas, no para que lo arrincones y lo ignores.

Te lo entrego para que con El y en El peregrinen, se dejen conducir por el Espíritu, por el “Yo te mostraré”. Solo con mi Hijo Amado sabrán administrar las obras misteriosas del Reino.

Solo con mi Hijo vivirán en la verdad, estarán en camino y tendrán la vida verdadera.

Como CAFA agradecí por este momento de oración que es un verdadero alimento.

También la necesidad de seguir suplicando por el don de la fe, del vaciamiento, y de estar en continuo discernimiento de las cosas del Padre en la cotidianidad de la vida, en la impotencia, en las limitaciones, en las alegrías, en la enfermedad, en el encuentro, etc.

Carolina: Acción de gracias por la CAFA que vive en Cristo por la fe. En la fe tenemos la certeza de estar en Cristo. Recogiendo la vivencia de esta parcela reconozco que el Señor nos fue conduciendo por etapas: se me nombraba el desposeimiento de personas significativas en la vida de la CAFA, de nuestra misma persona: criterios, juicios, sentimientos, planes, hasta centrarnos en El, por la fe en la comunión con su Espíritu como cuerpo espiritual, como sujeto CAFA, donde El nos hizo experimentar su protagonismo. Atenta a las insinuaciones del Espíritu, aprendimos a acogerle a Cristo que se manifiesta en la comunidad y fuimos experimentando la transformación de la comunidad que va encarnando el pensar y sentir de Cristo. Y todo esto en total gratuidad, gracias a la fe. Él es el que sabe, nosotros no sabemos, vamos aprendiendo a dejarnos conducir por la briza de su espíritu.

Lichi: Punto 10. "La fe es el verdadero camino para crecer en la santidad de Cristo". Experiencia de silencio y acogida profunda al camino que el Señor nos entrega para participar de su vida, de su santidad. Gustar por dentro de esa gracia que nos puso, me puso en camino, identificada como mujer peregrina de la fe, promesa que dinamiza mi vida, que me dispone a dejarme conducir a lo desconocido con confianza. Itinerario por etapas que el Señor celebra con su CAFA amada, peregrina, confiante. Reverencia profunda ante la Santidad de Jesús que nos sitúa peregrinos, en búsqueda, en escucha. Personalmente recrea en mí la gracia de la fe como punto de inicio de mi seguimiento, del camino de entrega en estos años, base que me mantiene en estos 9 años de estar en su Compañía. Agradecer por las mediaciones (especialmente, el P. Carlos), para continuar creciendo y recorriendo este camino dinámicamente hasta llegar a la plenitud de la vida en Cristo. Moción que me acompaña y dispone para ser acompañada en mi crecimiento en la fe.

Mary: en la oración inicial, la vivencia de cómo Jesús nos introduce en el misterio del Padre como persona, como comunidad. Pasar de mi experiencia personal a sentirme CAFA, sentir como comunidad, vivir como comunidad. Remontarme cómo el Señor nos ha ido manteniendo en la peregrinación, en consonancia con la invitación a Abrahán: sal de ti…, deja… , suelta…Una CAFA que está en escuela de formación, que ha pasado en la peregrinación por muchos momentos oscuros, de confusión, del no saber cómo, el tocar fondo cuando por empeño humano, desde nosotros quisimos llevar adelante las cosas de Dios…El Señor nos fue llevando por etapas, nos fue probando la fe personal, nos fue despojando, mucha gente se fue, nos fuimos y ahora estamos de vuelta, pero lo QUE PERMANECE ES LA EXPERIENCIA DE AMOR Y FIDELIDAD DE DIOS con esta pequeña parcela de la viña del Señor. Siento que vuelvo a casa, en esta comunidad, y todo es DON y se nos da en Jesús y recojo el llamado y exigencia a vivir en gratuidad. Le agradecía mucho al Señor la experiencia del de dejarnos conducir, nos lleva al corazón del Padre, nos lleva a la casa y ya estamos en la casa, pero a ciegas, fiados en Él, en su fidelidad. Jesús es la puerta en este misterio de comunión, nos atrae a centrar nuestra vida en Él, nos une cada vez más en Él, nos hace administradores de las obras del Padre en ÉL, somos mediadores…la obra es creer en el Hijo. Colaborar y mediar para que otros reciban la fe. El Señor es el dueño de esta experiencia de fe, y gracias por este momento.

Fátima: me centré en la peregrinación de Abrahán, figura de la CAFA peregrina, la fe de Abrahán puerta por donde el Señor lleva a la santidad y que es un regalo de Amor. La vida de la CAFA está para seguir peregrinando en la fe. Abrahán se detenía para agradecer…La CAFA en Cristo permanece en la peregrinación con nosotros y la única posibilidad para seguir avanzando es mantenernos firme en la fe. La puerta es la fe en Cristo Jesús, puerta segura, CAFA con posibilidad de seguir transformándose, de ahí la novedad Escuela de Santidad. No están solos, están en las manos del Padre, no tengan expectativas. Entregarse a Cristo Jesús.

Emi: Jn.10, 9:” Yo Soy la puerta: el que entra por mí está a salvo. Circula libremente y encuentra alimento “Confirmación de que la CAFA está en Cristo, que permanece en Él. Está en la casa, eso es lo que Dios quiere para nosotros. CAFA en Cristo, ésta es su vida. En Él vivimos nos movemos y existimos. En Cristo, el Padre nos hace Dios por participación…Me llena de paz, confianza, vida.

ILI: Experimento agradecimiento profundo por el espacio CAFA. La primera moción es el ir concluyendo una etapa, moción fuerte de gozo, alegría, paz al mirar el peregrinar y como Abrahán levantar aquí una estela por la etapa concluida. Y como un corito que se repite me resonaba “la fe es el camino para crecer en la santidad”. Me dejaba cuestionar también por la incoherencia de la CAFA, lo que vive en lo humano, en lo real, por ejemplo la ausencia en nuestro voto…personalmente en la fe vivo a mis hermanos, no me saca la paz y me queda el amor del Señor entre nosotros y agradezco por este peregrinar en fe en comunidad.

QUÉ ME QUEDA DESPUÉS DE ESCUCHARNOS…

· Que la CAFA peregrina en la fe, sostenida por la misma fidelidad de Dios. Sentimientos de gratitud.

· Cristo es la novedad, Cristo es vida, fundamento de la CAFA, alimento. Me resuena con nuestro proceso “Todo lo que vivo en lo humano, vivo por la fe en el Hijo de Dios que me amó y se entregó por mí”

· Profunda gratitud por la fidelidad del Señor.

· Llamado atento para poder pasar ese amor a los demás.

· Amor profundo y gratuito del Padre en su Hijo Jesús en la CAFA.

· CAFA, escuela de santidad y regalo del amor gratuito entre nosotros. CAFA peregrina en la fe, sostenida por la fidelidad de Dios.

· Me queda la fidelidad de Dios con la CAFA y ese Dios que hace en su Hijo morada.

· Experiencia profunda de agradecimiento por la fe que se nos regala y nos hace peregrina.

· CAFA administradora del Reino de Cristo Jesús.

· Paciencia y fidelidad de Dios. Poder estar en seguimiento con su Hijo

ENCUENTRO CAFA, MAYO 2011

• ¿Cómo le resuena este punto 9 de nuestro folleto de la santidad a la CAFA?
• ¿A qué le impulsa a la CAFA

Fátima: Después de leer los textos en la oración, y el punto 9, siento que el Señor me dice como CAFA, que somos peregrinos en la fe como Abraham. Por eso la fe es el verdadero camino para la santidad. La CAFA está llamada a morir para Resucitar y mediante la resurrección ver los frutos de la santidad en la entrega por los demás.
La CAFA es Santa por su manera de vivir compartiendo la fe que le ayuda ir madurando en el proceso de entrega al Señor que nos hace sentir nuestra identidad como hijas e hijos de Dios en el amor. Si nos quedamos solo en juntarnos y compartir sin darnos a conocer la obra que el Señor hace en nuestro interior por la fe, no hay crecimiento espiritual.
El Espíritu del Señor Resucitado invita a la CAFA a dejarse llevar por su novedad; reconocer, captar y asumir lo nuevo que nos muestra como pequeño resto que vive en unión de corazones.
La CAFA, es animada, impulsada por Espíritu del Señor a peregrinar como elegidas, elegidos de Dios para vivir en la santidad desde su pequeñez y debilidad donde el Señor nos va transformando en su Resurrección.
Siento mucha paz y esperanza como CAFA porque a Dios le pareció bien que su Hijo Jesús nos llene de su amor y de su luz para reconocer que somos necesitadas de Él para nuestro crecimiento personal y así ir madurando en nuestra fe que nos lleva a la Santidad.

Digna: Agradecida al Señor por este espacio de oración, de intimidad con Él, por su Palabra que reconforta, anima, impulsa a seguir peregrinando en la fe, en su seguimiento. “El amor de Dos ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo”. Y que esta gracia de seguimiento a Jesús en comunidad es para todos lo que Dios llama, como dice el texto, es para todos sus descendientes, no solo para sus hijos según la ley, sino también para aquellos que por la fe son hijos suyos. La gracia es para todos. “Ser uno con el Hijo como CAFA”. Permanecer en la fe en comunión con el Hijo por el Espíritu Santo que ya ha sido derramado en nuestros corazones.

Noemí: a través de Romanos 4 Primeramente el Señor me llevó a agradecer por el don de la fe que le regaló a la CAFA, y yo por intermedio de la CAFA enriquecerme de ésta gracia así como Abrahán y otras personas fueron viviendo la fe, él confió y esperó en el señor por eso le dio la gracia de ser justo. Creo firmemente que debemos de seguir agradeciendo y abriéndonos a la gracia del Espíritu para que esa experiencia de la fe viva sea realidad en cada momento, y en lo concreto de nuestras vidas y entre nuestros Hnos. Me uní a través de la oración para pedir la gracia de la apertura como CAFA y de seguir dejando serle al Señor en nuestras vidas y de ir compartiendo nuestra fe. Agradecer y reconocer la presencia del Espíritu a través de nuestro Bautismo y de sentirnos Hijos inmerecido de ésta gracia. También reconocí que por medio de la fe llegamos a experimentar en nuestras vidas la promesa de Dios que es real o sea él es fiel, por tanto nos comparte para que lo vivamos desde allí como CAFA.

Teresita: en la oración me llegó mucho, que gracias a nuestros padres, nuestros antepasados, por el Bautismo participamos de la vida divina de Dios y nos entrega su Espíritu de Cristo Jesús – el Único Santo.
Así también, la CAFA es fruto de la fe de muchos hermanos y hermanas, que contra viento y marea supieron mantenerse en pie, porque creyeron en la promesa sin ver nada.
La CAFA llamada a celebrar la memoria viva de la fe de los que los precedieron, de los presentes y de los que vendrán.
Llamada al sobrecogimiento y al anonadamiento, porque la gracias que se le entrega es gratuita e inmerecida.
¿A qué le impulsa a la CAFA?
A la corresponsabilidad, a ayudarnos a tomar conciencia de todos los talentos que Dios nos ha confiado, preguntarnos como CAFA, cómo los estamos multiplicando: el amor gratuito (no solo entre nosotros sino entre los hermanos y hermanas que Dios nos ha regalado), la comunión en el espíritu, la CAFA como escuela de santidad, las parcelas a cultivar, las nuevas hermanas y hermanos que se han acercado y los que viven en las diásporas…Otros que se han alejado…
Y así como somos frutos de tanta gente, colaborar, sentirse canales de gracia para otros a pesar de nuestra pequeñez, de nuestra incoherencia y limitaciones. Y que éstas no nos impidan de dejar obrar a Dios en nuestras vidas.

Norma: Todo este cap.4 de la carta de Pablo a los Romanos me ayudó mucho. “La fe es el verdadero camino a la santidad, porque la fe da lugar a la gracia de Dios…”La fe le dio fuerzas a Abrahán. Dios se lo tomó en cuenta para hacerlo santo. Abrahán esperó contra toda esperanza. La fuerza está en el Señor y que cuando Dios promete, Dios es fiel a su Palabra. La fe es un don de Dios que regala a la comunidad. La CAFA, escuela de Santidad, es favorecida con este don y camina en fe y en comunidad.

Reina: “La fe es el verdadero camino a la santidad. Por la fe de nuestros padres llegamos al Bautismo. “Por el bautismo, fuimos sepultados junto con Cristo para compartir su muerte, y, así como Cristo fue resucitado de entre los muertos por la Gloria del Padre, también nosotros hemos de caminar en una vida nueva.” (Rom. 6, 4), resuena con la vivencia de la CAFA, acogiendo la misericordia del Padre y en continuo agradecimiento por la gracia de la fe, se deja conducir y nos impulsa a transmitir esta vivencia.

Carolina: Experiencia de gratitud honda por la gracia de la fe que se nos ha concedido con nuestro bautismo así como también en la vivencia CAFA de manera tan gratuita, inmerecida. En mi caso, esta gracia aconteció aun cuando no estaba siquiera en condición de pedirla. Nuestra inserción en la vida en Cristo por la fe y el crecimiento de esta semilla es por obra y gracia del Espíritu Santo. La CAFA es una continua experiencia palpable de vida en el Espíritu de Cristo, gracia extraordinaria, donde se nace “sin unión física, ni deseo carnal, ni querer de hombre, aquí se nace de Dios” (Jn1, 13).
Durante la preparación de este encuentro venía viendo la vital importancia de la fe en la vivencia de nuestra identidad CAFA, escuela de Santidad. No podemos entrar en ninguna de las otras parcelas, o ninguna de las dimensiones de la santidad sin la fe. La fe en Cristo puerta de entrada para la divinización. Sólo por la fe podemos dejar que Cristo viva en nosotros y administre en nosotros las obras del Padre. “Por la fe estamos en paz con Dios” experimentamos al Espíritu de Dios derramado en nuestros corazones, percibimos y somos testigos de la acción del Espíritu en nuestra propia vida, la transformación de nuestro pensar y sentir en el de Cristo.
Con relación a la segunda pregunta ¿A qué nos impulsa? La CAFA como escuela de santidad, como contexto comunitario, es impulsada a dejar que el Espíritu desarrolle en nosotros la vida en Cristo.

Pausamos para recoger las mociones que nos quedan después de escucharnos

• La CAFA es un contexto de experiencia de fe, un contexto de crecimiento en la vida en el Espíritu de Cristo. Sentimientos de paz, de gratitud. Disposición de escucha y acogida. Impulsada a permanecer en la fe, en la comunión con Cristo en Dios y con los hermanos. Atenta, en discernimiento.
• La CAFA es un contexto donde se palpa la obra de Dios. Regalo de Dios que permanece en la peregrinación. Espacio de crecimiento, donde me siento acogida en mi pequeñez, en mi debilidad. Un contexto de experiencia del amor de Dios.
• Fuerte experiencia comunitaria de vida de fe. Seguir confiando, reconociendo en lo concreto la fidelidad de Dios.
• Me recoge mucho los textos del Resucitado. Cómo se manifiesta en comunidad. Admiración por la eficacia de su Palabra, cómo toca; y esta gracia, no queda aquí, llega a otros. Agradecimiento al Señor por su vida que ha sido derramado en nuestros corazones. Admiración por la acción de su Espíritu. Animada a seguir peregrinando en la fe, en comunidad con los hermanos y hermanas. Gracias Señor.
• La CAFA es fruto de la fe porque alguien creyó y acogió y nos enseña a acoger esa novedad. Dios nos impulsa a transmitir esta vivencia.
• La fe único camino de santidad. La CAFA llamada a vivir de la fe.
• Se me recoge la CAFA como una vasija transparente. Transparentar tantas gracias derramadas, para que otros disfruten esa presencia en lo cotidiano, que se difundan estas gracias a través de los diferentes canales donde nos encontremos. Dejar que la gracia vaya empapando, regando, dando frutos. Estar atenta para que tantas gracias derramadas vaya dando vida.

ENCUENTRO CAFA, ABRIL 2011

Diosnel: Al ver las gracias que se hacen vida en nosotros siento y vivo desde la interiorización la gracia fundamental de la presencia de Dios en cada uno. Soy CAFA y todo a la vez, llevo esta gracia y vivo desde ahí. Tomo conciencia de esta gracia, caminando con Él. Mayor conciencia con mi familia, especialmente en este tiempo de muchos enfermos. A veces me levanto a las dos de la mañana para atender a los enfermos y las tentaciones están ahí, pero me siento agradecido al Dios Trinitario. En cada acción de gracias siento que es una acción del Espíritu Santo como CAFA en mí.
Siento alegría y presencia de Dios en nosotros, también siento cuestionamiento, gozo ante la presencia de Dios en nosotros. Doy gracias a la CAFA por esta presencia en cada uno, por hacerme consciente de que Dios está en cada uno de nosotros. Gracias.

Digna: para mí fue corto este tiempo, me quedé desde la lectura gustando interiormente el compartir de cada uno de los miembros. Era el Señor hablándonos desde la vivencia de su obra en cada uno, mucha admiración de esta obra de Dios en la CAFA. Me admiraba de como Dios respeta nuestra libertad, no nos fuerza para entrar en su vivencia, sino nos invita. Mucha paz, descanso, sosiego en Él. Gustar tantas gracias recibidas.
Sentía de nuevo esta comunidad tan regalada por Él, su presencia, habitada por El. Llamada a estar atentos a no caer en el protagonismo. Se nombraba la llamada de atención, estar vigilantes, no caer en esa tentación. Colaborar con el Señor, hasta que Cristo diga que es Él quien vive en nosotros. Colaborar, dejarle a Él totalmente que nos conduzca en el día a día, en la comunidad, en la escuela y llevar esa presencia suya. Eso se nota en el día a día, con los hermanos, los niños. Me invitaba a seguir colaborando desde la apertura, como decía el compartir de muchos. Me dejó un gusto interior el volver a leer todas las vivencias, ver como Dios obra en cada uno y cada una, una sensación de pequeñez. Nuestro Dios se ha fijado en este pequeño resto porque a Dios le pareció bien. Agradecida al Señor por pertenecer, ser miembro de la CAFA como comunidad. Me quedó gustando, centrándome de nuevo en las vivencias del compartir de mis hermanos.

Ili: la lectura fue de mucho gozo. Las gracias que cayeron, me sentía ubicada en mi lugar, la CAFA. Un regalo, sentirme bien en esa casa, espacio. Ser uno con el Misterio Trinitario, uno en mí y en nosotros ¿Cómo lo vivo en el día a día? Después de leer y dejar resonar, sentía un asumir una nueva misión, esta gracia se expande y no a través mío, es la gracia de la CAFA. Ser Escuela de Santidad nos lleva a otras estructuras: el ISEF, lo de Fátima con las hnas. Vicentinas, el trabajo en el barrio, las Teresas, nos regala estructuras. Esta gracia de ser uno con el Señor alcanza a muchos. Ésta es la Escuela de Santidad, sin saber, sin caminos previos ni establecidos. El amor de Dios descubrimos y llega. Alegría interior de que Dios está haciendo su obra, esto me queda.

Cristino: lectura reposada, tranquila, volver a refrescar lo escrito. Al principio veía si me quedaba en una parte, luego fui leyendo desde una lectura pensada. Después de leer todo, con la CAFA pedí la gracia de poder nombrar la vivencia de cada día ¿cómo estoy viviendo estas gracias día a día? Me vinieron tres gracias. Una, la unidad en el Espíritu, la vivencia en el día a día, reconocer que vivo intensamente esto, en el trabajo, en la misión, en la casa y no lo vivo solo, sino como CAFA. Tomar conciencia de la gracia de sentirnos administradores de la Gracia.
Otra gracia CAFA, vasija de gracias; no individual, lo veo con más intensidad. La CAFA vasija y ubicarse ahí, certeza profunda. Y la tercera gracia la CAFA Escuela de Santidad. Tomar conciencia de esta escuelita, gente débiles y desde ahí es la escuela de fe de aprendizaje, desde la debilidad. Personas pecadoras, pero ahí está la fuerza de Dios. Sentía el momento corto, pero me sentí bien, muy agradecido.

Marisa: al volver al leer la recogida me impresiona la gracia como CAFA, Escuela de Santidad, aprender a ser administradores de las obras de Dios. Dejarnos conducir por el Espíritu de Dios. Mirar el día a día a partir de esto. En la interiorización, el Señor nos fortaleció en la comunión, la gracia de la comunión más profunda desde el interés por el otro. Me quedaba el deseo y vivencia de Dios, el Amor gratuito que recogía todo.

Sara: me ayudó mucho la lectura de las experiencias de cada uno en el compartir. Sentía mucha sintonía y fui dejando resonar en el corazón estos compartires y confirmación de muchas gracias, que la CAFA recibe. Contemplar a la CAFA sencilla, acogedora, que se deja conducir y está en camino. Salió fuerte la Escuela de Santidad, estar en permanente aprendizaje de la vida de Cristo. Abiertos a lo que Dios nos regala, a la fidelidad de Dios en la CAFA. Y esto lo que nos hace fieles, comunión en la universalidad, se va extendiendo. La gratuidad y la comunidad que se alimenta en el amor. Me sentía más fortalecida. Sentí paz y acogida a estas gracias. En el día a día me impulsa a dejar hacer al Señor en mí.

Reina: al releer, al retomar me remitía al encuentro de la CAFA y me quedaba mucha paz, serenidad. Experimentar los tres días de compartir, sentidos y vividos. Retomando desde ahí veo que el Señor me llevó por ahí. Fue una gracia reconocer la Escuela de Santidad. Me ayudó a dejar resonar que implica, desear y entrar en esta gracia. Se me une a este tiempo de cuaresma, de conversión y pedí la gracia que Él conduzca.

Teresita: me ayudó mucho la lectura, hizo brotar gratitud y sobrecogimiento ante las gracias. La mayor gracia en la vida diaria, el Espíritu Santo donde nos llamó porque le pareció bien. Todos, pertenencia de Él, pequeños para aprender a amar y ser amados gratuitamente. Dejar que Cristo, el único santo viva en nosotros y administre las obras. Necesitadas de permanecer en él y ser luz donde nos llame. Tomarnos en serio y colaborar con las gracias recibidas. Empecé con las primeras interiorizaciones hacia la oración como CAFA.
La CAFA no se reduce a esta vasija, se va extendiendo. Me encontraba con un río de gente en la misión que estaba realizando. Es una gracia que no merecemos, aceptar que es obra de Dios y no nuestra.

Mary: gratitud al Señor, no pude estar en la interiorización. Un regalo al retomar el compartir. La vivencia más fuerte es que yo no salí nunca de esta CAFA, estuve desde el principio, me fue trayendo por etapas. El Señor ha hecho nacer la CAFA, es obra de Él, le agradecía la fidelidad de Dios que le dio vida, algunos llegan, otros salen pero sigue poniéndonos en caminata de fe. No estoy sola, ni siquiera con mis hermanas de comunidad, la fuerza que tiene la presencia de todos ustedes. Nos va llevando al seguimiento de Jesús a las familias, congregación y todo esto genera comunión, que se mantienen en el tiempo, no somos nosotros es Él, algo que se me escapa estoy tocando. Dejar a Dios ser Dios, llamada latente. También el que sea en mí y en nosotros, desapareciendo nosotros.
El Señor hace camino para que se historice la gracia. Sentirme administradora y colaboradora. Soy administradora inútil, de pequeñez y debilidad. Cuando yo no puedo él puede y esta vivencia es de la CAFA. El Señor me ha hecho experimentar y gustar. Es un aprendizaje en mi comunidad local que se amplía en la CAFA grande. Le daba gracias por sentirme una parte pequeñita en la CAFA, esto es luz para la iglesia paraguaya. La presencia de Fide me muestra lo macro, donde estamos, estamos en comunión. Le doy gracias al Señor.