QUIENES SOMOS 2006
"Yavé me llamó desde el vientre de mi madre, desde las entrañas maternas pronunció mi nombre." -Isaías 49, 1.POR ORDEN ALFABÉTICO:
Beatriz:
Soy Beatriz O., teresiana desde hace 52 años, uruguaya, de 69 años de edad. El Señor me regaló nacer en un hogar donde Dios era lo más importante y constantemente experimentábamos su Amor Misericordioso. Especialmente mi padre nos lo hacía descubrir en las dificultades, enfermedades, siempre. No puedo dejar de agradecer a Dios Padre, cómo el Don de la Fe fue vida en mí desde que me conozco y ha sido y es la fuerza de mi vida. Y el Señor, que siempre me tuvo de Su mano, que siempre me mantuvo en tensión hacia El, me regaló que en el año 1994 hiciera Ejercicios con Carlos en un momento muy doloroso de mi vida, en que me sentía totalmente perdida, casi ni sabía quién era... sólo me mantenía la seguridad de Su fidelidad. El Señor me esperaba en esos Ejercicios para regalarme la Fe Radical y abrir mi vida a los pobres. No tengo palabras para agradecer al Padre por lo que El ha ido haciendo en mí en el correr de estos años, por las distintas oportunidades que me regaló de poder seguir haciendo Ejercicios con Carlos, de participar en Interiorizaciones y haber participado en algunas ocasiones de la CAF en Misiones compartiendo la vida con las Comunidades de Santa María y Santa Rosa. La compasión y la misericordia de Dios siempre están presentes en mi vida. Les puedo decir hoy, a mis casi 70 años, que soy feliz. Lo único que ansío es que el Padre haga en mí y de mí lo que El quiera, tengo certeza de su Amor entrañable, sé que nada me sucederá sin que antes no me haya dado su fuerza. Me dejo enteramente en El. Jesús me tiene dentro de El en el Padre, fue una gracia inmensa de los últimos Ejercicios y allí me mantiene por pura compasión. Desde mí nada puedo, sólo dejar que El sea en mí y que me vaya podando y despojando de todo lo que a El le parezca más conveniente para su gloria y para el bien de los hermanos. El compartir la Fe con todos ustedes me da un gozo interior muy profundo. Me hace mucho bien descubrir el actuar del Padre en cada uno. Por todo alabo y bendigo al Padre, al Hijo y al Espíritu.
Carlos:
Creo que todos me conocen. Soy cubano de nacimiento y entré en la Compañía de Jesús en EE.UU. en el año 1962. Como ven, no soy ningún pichón. Durante el tiempo de mi tercera probación en México, el Provincial de mi provincia en EE.UU. y el de Paraguay me invitaron a venir al Paraguay para trabajar con Comunidades de Base, pues tenía bastante experiencia en esa área. Llegué al Paraguay en 1985 y me he quedado acá. Mi primer trabajo fue en el Centro de Estudios Paraguayos, en Asunción, colaborando en el análisis social del país, ya que en mis años mozos me especialicé en sociología. Después me pasé 12 años levantando - con mis hermanos campesinos, con unas hermanas muy queridas y mis hermanos jesuitas - Comunidades Cristianas en Misiones, Paraguay. Mucho tendría que decir sobre eso, pero no hay tiempo. Siete años largos estuve en el Centro de Espiritualidad Santos Mártires, dando EE.EE. personalizados a mucha, mucha gente. Ahora estoy en otra cosa. Desde que regresé de Argentina y Uruguay a finales de diciembre de 2005, he asumido mi nueva misión: Vicesuperior de la enfermería de la Provincia. Somos 10 personas en la comunidad, la mayoría con necesidad de un cuidado constante. Pedí al Provincial un cambio, después de haberme dedicado a EE.EE. por 7 años en el Centro SS.MM. Mi trabajo es humilde y servicial, justo lo que sentía en mi espíritu que mi Dios me pedía. Sin embargo, me han encargado también la evangelización de los educadores de todos nuestros colegios en Paraguay. Me alegra esa misión adicional, pues la considero muy importante para que nuestros colegios crezcan en su identidad cristiana en seguimiento de Jesús.
Carlos T.:
Nací en Louisiana, EE.UU. donde mi familia vivió en el campo. Coseché algodón a la tierna edad de 5 años. Entré en la Compañía de Jesús el 31 de julio en el año 1946. Vine al Paraguay en el año 1980 y viví en Santa Rosa, Misiones por 24 años como copárroco de esa Parroquia. Participé en la Comunidad Apostólica Formadora de Misiones, junto con otros jesuitas y hermanas de diversas congregaciones, animando Comunidades Cristianas. Ahora estoy en San Ignacio, Misiones de copárroco de San Ignacio y Santa María y sigo participando en la CAF Misiones – un espacio de discernimiento pastoral, compartir de vivencias y de ayuda mutua en la búsqueda de la santidad para que el Padre haga su querer amoroso en nosotros y en nuestros hermanos campesinos.
Carmen de Dios:
Me llamo Ma. del Carmen de Dios. Soy posesión de Dios desde hace sólo unos pocos años, después del retiro que hice con Carlos en donde el Señor me hizo de verdad "pertenencia suya". Bueno, esto de "ser posesión de Dios" creo que lo soy desde mi nacimiento, pero yo me hice consciente de ello hace poco tiempo. El ser de Dios define mi identidad.
Soy la cuarta hija de mis padres y hermana de mis hermanas y hermano, muy mimada y caprichosa. Nací en el seno de una familia paraguaya, tradicional, muy religiosa. De mi familia aprendí a relacionarme con Dios y María.
Además, también en familia nació mi vocación. Tenía 17 años cuando salí de mi casa para entrar en la Compañía de Santa Teresa de Jesús. Mis primeros pasos los di en San Juan Bautista Misiones, como aspirante, y después 3 años en Uruguay. Aún recuerdo cómo lloré el desprendimiento de mi familia, sólo el deseo y la ilusión de ser fiel al llamado, hizo posible que superara tanto dolor por la separación.
Regresé a Paraguay y prácticamente desde entonces, sigo viviendo en Asunción. Por supuesto que con tareas diferentes. Mis años de juniorado los dediqué al estudio. Soy maestra y ejercí 4 años la docencia, muy poco ciertamente. Hice la licenciatura en educación y vivo dedicada al campo de la educación, en este momento en la dirección del colegio, aunque, el verdadero Director es Jesús, yo soy la nombrada, pero quien lleva el colegio es El... no crean que es planillero. Tarea linda la de ser educadora, pero desafiante y exigente.
Hablé mucho y no sé si dije algo de mí para que me conozcan. Si falta algo ya se encargará otra persona de completar.
Ah, me olvidaba mencionar mi gran aspiración: SER OTRA TERESA DE JESUS como nos quería San Enrique a las teresianas.
Carolina:
Nací en Santa María de fe Misiones, Paraguay. A los 16 años sentí el llamado del Señor a la vida religiosa y entré a la congregación de las Hnas. Vicentinas de Zagreb. Desde el tiempo de mi formación religiosa de 1979 hasta 1997, viví en la Argentina, donde hice mis estudios académicos y trabajé durante tres años como enfermera, luego ejercí la docencia 4 años. Después me confiaron la formación de las junioras, y por 6 años fui maestra de novicias. Durante ese tiempo coordiné también el Centro de formación intercongregacional de La Plata. En junio del 1997 me enviaron a Paraguay, fui provincial durante tres años, luego me dediqué a la evangelización de los más pobres, durante dos años en Ciudad del Este, un año en San Ignacio y estos últimos tres años en el Bañado Sur – Asunción, aunque desde febrero de este año estoy viviendo en el Colegio Inmaculado Corazón de María, donde una parte de mi tiempo lo dedico al Bañado y otro a la asistencia, educación y evangelización de los pobres que acuden al colegio solicitando algún tipo de ayuda.
Mi proceso de fe: desde el comienzo de mi llamado a la vida consagrada he experimentado una atracción muy fuerte por un seguimiento radical al Señor, pero la gracia de poder vivir esto en la fe se me concede en el año 1993, a partir de los EE.EE. con el P. Carlos, donde mi estatua de perfección espiritual (vacía y farisaica) cayó y se hizo añicos por gracia de Dios. Desde ese momento, el Señor fue transformando con su Espíritu mi vida por el don de mi fe en El. En 1995, se me concedió la gracia del retiro del mes, donde el mismo Señor me reveló que no era madura en el amor ni en el sufrimiento para esa experiencia y por pura compasión desde ese momento su reinado soberano en mi corazón fue creciendo por el poder de su Espíritu. Desde que vine al Paraguay, el Señor me concedió la gracia de hacerme participar de su Bautismo, pasando con El: incomprensiones, calumnias, difamaciones que me introdujeron a una comunión cada vez mayor en la fe con su Espíritu para su mayor Gloria. Ahora por pura gracia estoy en la CAFA, viviendo el ser un cuerpo apostólico en el corazón de Cristo animado y vivificado por su Espíritu.
Fidelina:
Soy Fide, paraguaya de 37 años de edad. Hace 16 años que llegué a Santa María Misiones, donde ingresé y viví 8 años en la congregación de la Compañía de María, ODN. Allí me integré a la CAF (Comunidad Apostólica Formadora) donde he crecido en mi entrega amorosa a Jesucristo, por medio del contexto vivencial de la comunidad y de las Comunidades Cristianas de las parroquias donde he vivido. Fui destinada a Argentina por un año, luego a Chile por 6 meses. Cuando volví a Paraguay me integré a la comunidad de Asunción de mi congregación, en el Bañado Norte, una zona de mucha pobreza. Estudié sociología en la universidad. Ahora he regresado a Santa María y continúo el servicio de delegada que se me ha confiado hace más de dos años; estoy trabajando sobre mi tesis final de la carrera y colaboro en animar la vivencia de la CAF y de mis hermanas.
Hermelinda:
Soy Hermelinda R., hace 22 años que he salido de la tienda familiar, al término de mi estudio de Formación Docente. Ciertamente cuando salí de casa, salí con gozo pues el mismo Señor pedía que fuese de El únicamente y a la vez con mucho dolor porque en aquel entonces tenía que desprenderme de alguien muy significativo en mi vida como lo fue mi querido abuelo. Esto da la pauta que me crié y me malcrié con abuelos. ¡Hermosos años de mi etapa infantil y adolescente! Aquellos fueron días, semanas y años felices e inolvidables para mí, hasta hoy día resuenan en mí muchos momentos. Ah, soy de la Ciudad de Itauguá, Paraguay. Tengo cuatro hermanos y soy la primogénita.
Pertenezco a la congregación de las Hermanas Educacionistas Franciscanas de Cristo Rey. Mi primera etapa de formación religiosa la viví intensamente con cuatro compañeras con gozo, alegría y entusiasmo hasta que un buen día… me vino un sinsentido por la vida escogida de Dios para mí, pues por el camino se fue aguando y poco a poco me iba convirtiendo en una simple funcionaria. Por lo tanto se inicia en mi vida grandes cuestionamientos, inquietudes, interrogantes durante un buen tiempo. En ese ínterin la Provincial increíblemente me nombra Maestra de Novicias, entonces tenía 32 años. De esta situación comienza mi Dios a hacer su proceso, ¡había sido! Estuve por Limpio, Paraguay 9 años en este servicio.
Ciertamente en ese primer momento de mi vida religiosa me mantuve haciendo cosas muy interesantes, buenas, agradando a tantas personas y complaciéndome a mí misma con los dones que el Señor me regaló y por supuesto esto hacía que girara siempre sobre lo mismo. No podía irme hacia ningún lado.
A ciertos miembros de la CAFA conocí desde el año 94 y más concretamente en una interiorización sobre la vida religiosa que en ese tiempo teníamos en el Colegio de las Hnas. Azules en Paraguay en 1996. Aunque no me gustó lo que decía en ese entonces el Paí Carlos sobre mi amigo Lázaro, el de la Biblia, el Señor tocó hondamente mi corazón y comenzó a obrar en mí, por pura gracia, una profunda conversión añetete. Así es, un día mi Señor iluminó mi vida, como lo dice el Pobrecillo de Asís, “el Hermano Sol invadió mi vida,” desde dentro e hizo su obra en mí, vino a mi encuentro y me dice: “Hermelinda, quiero que camines conmigo a mi manera y quiero habitar en ti.” Y realmente fue así y sigo procurando desde su gracia. Cuando El se encontró conmigo sentí que del interior mío surgió algo nuevo, experimenté vida nueva dentro de mí porque aquella pared o muro aparentemente fuerte que yo misma había fabricado se cayó, se derrumbó por gracia de Dios. Desde aquel entonces un nuevo horizonte se abrió delante de mí y poco a poco el Señor me fue y me sigue rescatando debajo de los escombros.
Muchas situaciones tanto personal como provincial y congregacional han sido fuertes muy fuertes, pero el mismo Señor venía a mí y me decía: “Hermelinda, Yo te hice experimentar mi amor por ti, te hice conocer la misión de mi Padre y como esposa mía estás llamada a pasar por lo que Yo pasé, pero todo en su momento. Yo te di mi compasión, Yo te di alcance porque si no fuese así no estarías en condiciones de correr tras de Mí. Sabes Hermelinda, no idealices mi camino. Mi amor y la misión del Padre en ti hacen que experimentes sufrimiento pero ese sufrimiento Yo estoy llevando contigo, jamás abandonaría mi obra. Hemos hecho alianza, has elegido mantenerte a mi lado. Eres mía. Entonces te basta mi gracia, mi fuerza actúa mejor donde hay debilidad.”
Hoy día, a pesar de todas las contrariedades que el servicio de provincial conlleva, por gracia de Dios me mantengo fiel en la fe. Me siento en las manos de mi Señor, aunque no siempre con gran docilidad de espíritu, aún me falta mucho por recorrer, pulir, mejorar... Muchas veces el Señor me ha empujado - violentado a vivir en el límite de la fe. Palpable es que en este proceso de fe, vida y misión vivo caída y recaída junto con numerosos rescates por el Señor. En muchos momentos he sentido y siento malestar, turbación y angustia, llantos, humillaciones,... pero el Señor en su momento me va iluminando cómo responder. Es Dios quien siempre me sorprende con nuevas insinuaciones de su Espíritu, El es mi única seguridad y mi paz. Es por eso que creo firmemente que la CAFA es una comunidad de vida en el Espíritu de mi Señor, El me asegura que por aquí está su Verdad para la Vida Religiosa.
Les agradezco en el Señor por permitirme compartir con ustedes su obra en mí, inmerecida, pero su compasión es más que todo. Un abrazo.
Lolín:
Pertenezco a la congregación de los Sagrados Corazones. Soy española de nacimiento. Estuve varios años en Paraguay y ahora estoy en Belo Horizonte, Brasil. En 1992 tuve la gracia a través de Carlos de hacer mi primer retiro personalizado donde el Amor de Dios se me manifestó a raudales. Después hicieron el retiro otras hermanas de mi comunidad y a partir de ahí integramos una CAF (Comunidad Apostólica Formadora) en Asunción con la congregación de las Azules y 4 laicos. Este retiro y los acompañamientos de Carlos han ido haciendo crecer mi fe. El Retiro de 1994 de 30 días, antes de asumir mi servicio como provincial de Paraguay-Brasil, me cambió por completo la mirada sobre mi vida y me llevó a tratar, dentro de todas mis limitaciones y miserias, a dejar que Dios fuera Dios en mí. Durante 10 años he sido acompañada por Carlos y haciendo casi todos mis retiros anuales con él. Pero todavía me falta mucho camino que andar para de verdad convertirme y espero que pueda tener de nuevo esa experiencia, porque Carlos es un hombre de paciencia y misericordia para acogerme una vez más…
Lourdes:
Soy Lourdes S., religiosa teresiana, uruguaya. En estos momentos estoy viviendo en Argentina, en una fundación reciente, en la ciudad de Arrecifes, provincia de Buenos Aires. Realmente lo que puedo decirles de mí es que Dios no ha dejado de buscarme a pesar de todas mis infidelidades. Él no dejó de fijarse en mí, y me fue atrayendo a sí, cada vez que me escapaba. Después de muchos años de lucha, de vida sin sentido, Él me mostró experiencialmente cuánto me ama en el año 1999 en el primer retiro que hice con Carlos. Yo no podía creer lo que experimentaba… Y desde entonces, con caídas, infidelidades, queriendo algunas veces recuperar lo que Él me regaló, nunca pude dudar de ser sumamente amada por Él y esto se vino a sellar en los Ejercicios de Mes realizados el año pasado: JESÚS TRANSFORMÓ MI VIDA, ME HIZO TODA DE ÉL, ME REGALÓ EL SER SU DISCÍPULA AMADA, que no es otra cosa que estar dispuesta por puro amor suyo, por pura gracia inmerecida, a vivir como Él vivió, a pasar lo que Él pasó, según al Padre le parezca bien.
En esto estoy, hermanos y hermanas, sé que no estoy sola porque Él me prometió estar siempre conmigo y además me dio hermanos y hermanas para que vaya por este camino de Fe, siguiéndolo a Él.
GRACIAS POR PODER COMPARTIR ESTE CAMINO CON USTEDES
Mari Carmen:
Soy Mari Carmen E., nací en Valladolid (España) en 1944. Entré en la Compañía de María en 1963. Me destinaron al Paraguay y después de estar ocho años en Asunción, me llevó el Espíritu a Santa María de Fe (Misiones) donde, junto con otras hermanas y hermanos nos concedió la gracia de vivir una CAF (Comunidad Apostólica Formadora), en la que "el empeño de nuestra vida fue dejarnos regir por Dios, entre caída y caída", verdadera experiencia de Salvación para mí. Nos dio el Señor la Identidad, de ser Anticipo habilitador de un Pueblo Santo, que se hizo Misión. Y junto con nuestros hermanos campesinos, compartimos la fe de Jesús y su manera de vida y se hizo transparente el Reino de Dios y el Amor del Padre a los pequeños. Esta vivencia de Pueblo Santo se fue extendiendo y nuestra CAF se fue dispersando y enriqueciendo con nuevos hermanos y hermanas, en las parroquias de Santa Rosa, S. Patricio... En esa peregrinación en la fe con ese Pueblo Santo de Misiones estaba, cuando el Señor me dijo: “Sal de tu tierra... y vete a la tierra que Yo te indicaré”. Esa tierra era Cuba y acá estoy desde el 2002, dejando, con la fuerza del Espíritu, que el Señor realice en mí su Designio.
María Luisa G.:
Bueno, no sé qué decir, tengo muy poca caminata con la CAFA y, para mí, ha sido un verdadero regalo del Señor.
Nací en Asunción, en el año 1970. En mi adolescencia, cuando empecé a preguntarme por el sentido de mi vida, sentí fuertemente la llamada del Señor, sentí que estaba destinada para ser TODA DE DIOS. Entonces supe que lo mío era la vida religiosa, que el Señor me llamaba para ser toda de El en ese estilo de vida. Así luego de muchas luchas con mi familia, pude ingresar a la Congregación un 10 de noviembre de 1987.
En el año 2005 hice retiro con Carlos, y fue algo realmente decisivo para mí. El Señor me confirmó y dio un nuevo rumbo a mi vida. Me invitó a la CAFA y al momento sentí que el Señor era quien iba guiando todo.
Ahora, todo ha cambiado para mí, ya no puedo salir, estoy como enclaustrada. Desde hace casi 1 mes, estoy trabajando en la nunciatura, con otras dos Hnas. más. La obediencia me trajo aquí y siento que mi misión es muy extraña. Nada tiene sentido, estoy en medio de la oscuridad, pero me guía la luz de la certeza, que sea donde sea, como sea, estoy llamada a ser TODA DE DIOS, lo demás no importa... como dice San Juan de la Cruz: esa "llama me guía más cierta que la luz del mediodía"
Mary:
Mis queridos hermanos: mi nombre es Mari Carmen M. pero soy Mary desde que llegué a Paraguay. Religiosa de la Compañía de María y desde hace 20 años llegué a Paraguay. Puedo decirles que esa fecha marcó en mi vida un antes y un después, ya que acá en esta bendita tierra guaraní Dios me esperaba para dar la vuelta a mi vida. Hasta ese momento creo que El me posibilitó hacer muchas cosas por El y en su nombre. Venía de estar 12 años en Colombia, en un pequeño pobladito en la cordillera de los Andes a 12 horas a lomo de caballo, y en esa pequeña comunidad Dios me regaló hacer, realizarme a todo nivel, como mujer, educadora, religiosa, entre la gente. Fui muy feliz, pero acá me esperaba el Señor, como digo, para otra cosa: hacerme de El en verdad, no preocuparme tanto por hacer cosas sino porque El fuera el Dios de mi vida y quitarme todo protagonismo. Me regaló, junto con mis hermanas de comunidad, y otras/otros hermanos religiosos de varias congregaciones, el acompañar a un pueblo sencillo y pobre. Juntos comenzamos un camino de peregrinación en fe radical y seguimiento a Jesús pobre y humillado.
Hoy Dios sigue empeñado en llevar adelante su querer, identificarnos con su Hijo Jesús crucificado; sólo deseo no estorbar su querer en mí ni en ustedes, mis hermanos.
Máximo:
Soy Máximo M., jesuita desde hace 21 años cuando el día 17 de febrero del año 1985 ingresé al Noviciado de la Compañía de Jesús en Paraguari. Después de haber vivido la etapa del magisterio (a la que denominamos así los jesuitas después de los estudios filosóficos) en Comunidad Apostólica Formadora en Misiones, mi vida ha cambiado radicalmente a partir de los ejercicios espirituales de vivir el seguimiento radical a Jesús en comunidad cristiana siendo acompañado de nuestros hermanos campesinos en Santa María de Fe. La experiencia de CAF en Misiones con mis compañeros jesuitas, mis hermanas de la Compañía de María y de las Misioneras de la Inmaculada Concepción me dio un nuevo enfoque de vivir el seguimiento radical a Jesús: “Dejando que el Espíritu del Sr. nos conduzca siendo Principio Habilitador del Pueblo Santo”. Esta vivencia se ha extendido y actualmente soy Párroco de la Parroquia Sagrada Familia (un barrio de 12 capillas, en su mayoría en los bajos del bañado norte), Barrio Tablada Nueva; acompañando la formación y consolidación de comunidades cristianas para llegar a ser una Parroquia: Red de Comunidad de Comunidades Cristianas de la Sagrada Familia de Nazaret. Estamos en proceso de transformación para llegar a ser una Parroquia de la Familia de Nazaret dejándonos conducir por el Espíritu del Sr. sintiéndonos Comunidad Cristiana del Sr.
Actualmente desde hace dos meses estamos viviendo Oscar y yo en una casa de inserción que se llama Santa Cruz, queriendo estar más cerca de nuestros hermanos y vivenciar a Jesús pobre humilde y humillado. Actualmente, soy el coordinador o delegado de las Parroquias Jesuitas del Paraguay y representante de la Provincia del Paraguay de Parroquias ante la Red Latinoamericana de Parroquias Jesuitas.
Mónica:
Soy Mónica R., chilena, hermana de Paola R. y pertenezco a la congregación Siervas de Jesús de la Caridad, cuyo Carisma es la atención a los enfermos, ancianos, niños y necesitados. Tenemos un Puesto de Salud en Mariano Roque A., desde ahí vamos a Misa a Santos Mártires todos los días. En el año 2002 conocí por permisión de Dios a Carlos. Desde mitad de ese año hice un pequeño retiro con él para seguir con un acompañamiento, después hice un retiro de 8 días, donde descubrí una serie de engaños del enemigo. Seguí el acompañamiento en el año 2003, seguían varios engaños, pero seguían las entrevistas con Carlos y todo el compartir con personas que van por este camino. Por gracia de Dios iba aprendiendo de todos. A mitad del 2003 y después de consultas tuve el regalo de estar en la CAFA en Asunción, Dios me iba mostrando todo lo que implica esta AVENTURA DE FE RADICAL, y LA ESCUCHA AL ESPIRITU, que para mí eran aspectos claves en esta caminata. El tener una COMUNIDAD, qué regalo es, pero en mi caso nadie en mi Congregación conoce este camino, así que "sola" congregacionalmente y con luchas por los permisos seguía adelante. En el año 2004 había iniciado el retiro de mes, pero al sexto día salían unos enormes engaños del enemigo, así que Carlos, gran instrumento del Señor, oraba y nos ayudaba, en mi caso, no podía continuar el mes, y justo en abril de ese año me destinaban a Buenos Aires. Hasta fines del mes, Carlos me siguió ayudando en la liberación que fue grande, muy profunda, y abría nuevos rumbos en mi seguimiento a Jesús. En medio del "no entender" y llena de luchas por "los desprendimientos": dejar mi querido Paraguay, dejar el sabio acompañamiento del P. Carlos, dejar la CAFA; mas había que SEGUIR PEREGRINANDO, ahora en Buenos Aires. CONFIABA QUE MI VIDA ESTÁ EN LAS MANOS DE DIOS, y EL sabe por qué permite este cambio de contexto, donde nada de AVENTURA DE FE se trata. En Buenos Aires tuve el buen acompañamiento de Nancy, odn, pues no podía buscar otro Sacerdote/Hna. que no fuera por este camino, nadie podía entender mi lenguaje, gracias a Dios seguía este proceso. En el año 2005, tuve el regalo del Señor de poder hacer un retiro de 8 días con el P. Carlos. En ese retiro Dios me regaló la gracia DE LA PODA, a partir de ahí suplicaba al Señor: "ten compasión y pódame en lo que TU sabes me tienes que podar". Dios fue obrando, cortando, podando IDOLATRÍAS, sentía que debía continuar DEJANDO A DIOS SER DIOS EN MI VIDA, pero había que podar: amor propio, intereses, imagen, aprender a vivir con personas que te rechazan, o mal interpretan lo que haces, la poda de mi persona, Y SOLTAR TODO LO QUE NO SEA DIOS. Esta poda implica DEJAR QUE DIOS EXPRESE en mí SU AMOR con aquellos que no te tratan bien, y así seguir PEREGRINANDO, CONFIANDO Y ESTANDO A LA ESCUCHA DEL ESPÍRITU; ir aprendiendo a discernir el buen y el mal espíritu. EL PEREGRINAR EN FE es parte de mi vida, no puedo expresar otro seguimiento a JESUS QUE NO SEA en esta línea: pedir constantemente la poda, QUIERO CONTINUAR LA CARRERA, sabiendo que de la poda luego sigue el despojo y la CRUZ, pero no entiendo una vida consagrada a Dios si no va por este camino, no hay otro. También me ha ayudado el compartir por email nuestro proceso con mi hermana Paola. Ahora me acompaña Ángeles M., porque a Nancy la cambiaron de país, y ya saben que Ángeles habla este lenguaje y comparte esta vivencia. Este año 2006 hice un retiro con el método común, un Sacerdote que da una charla; estuve con gran apertura al obrar del Espíritu de Dios, confiando que igual obraría como mejor quisiere. EL me sigue pidiendo que le DEJE SER DIOS EN MI VIDA Y SOLTAR TODO, y CONFIAR EN EL. La poda, gracias a Dios, sigue ahora con calumnias, pero sé que debe ser así. Me siento unida a todos los que vamos peregrinando en la Fe y en la Escucha al Espíritu. Espero que poco a poco que llegue a ser radical.
Nelly:
Soy hija de Dios por pura gracia y gratuidad en Cristo Jesús mi Señor. Soy Nelly B., en realidad mi nombre completo es María Gianelli B. Nacida en Coronel Oviedo, Paraguay, pero a los 14 años mi familia se estableció en Ciudad del Este después de vivir dos años en Montecarlo, Misiones (Arg.). En el año 1972 conocí a las hermanas de los Sagrados Corazones en C. del Este, desde ese año, sin saberlo yo, el Señor fue marcando mi vida, acompañando mi proceso de conocimiento de El y la inquietud por servirle en mis hermanos más pobres. Fui acompañada por las hermanas en mi discernimiento vocacional durante 6 largos años, donde la lucha interna fue muy fuerte entre lo que Dios me pedía y entre lo que humanamente yo sentía de resistencia camuflada de distintas maneras, rostros, situaciones; hasta que me tumbó y no pude decirle más NO. Fue en al año 79 que ingresé a la congregación; desde entonces el Señor va haciendo de las suyas conmigo: épocas de solidez vocacional, de gozo en la entrega, de vivir a full el servicio al pueblo, otras de incertidumbres, infidelidades, de vivir desde "mis proyectos", largos años de estudios de teología que me alejaron del contacto más radical de misión pastoral como lo que yo me sentía llamada -tiempos costosos fueron aquellos- en los que al mismo tiempo estaba de servicio como consejera provincial, formadora del prenoviciado, superiora de comunidad. Este año acabo de terminar 6 años de servicio como provincial, también años de mucha poda, de abundantes gracias costosas.
En año 85 conocí al Pai Carlos y a Tere (odn) y algunas otras de sus hermanas, en un encuentro de formación para agentes CEB. Pero fue en el 89 cuando me enviaron a San Juan de Ñe'embucu, cuando por designio del Padre, él entraría a formar parte de mi historia de una manera muy marcante; en él he experimentado la paciencia y la misericordia de Dios conmigo -aunque algunas veces me decía que no podía hacer nada más conmigo pero al final decía: "vamos a intentarlo, para el Señor nada hay imposible" y volvía a darme otra oportunidad y el Señor hacía de las suyas, me rescataba del pozo y cada vez más me fue mostrando que fuera de El no hay vida feliz posible. Al principio -desde el 89- anualmente tuve retiro con Carlos (diez por lo menos), otros años, una vez con Oscar, otra con María Luisa L., odn. Así el Señor me fue mimando, sosteniendo, rescatando, regalando su gracia a manos llenas.
Como comunidad de formación del prenoviciado hemos participado de los Encuentros Intercongregacional y Laical (entonces) desde finales del 95 y luego en la CAFA participo, creo que desde el 2000, contando siempre con la paciencia de Dios y de mis hermanos y hermanas, porque durante el servicio de provincial muchas veces no he podido participar, pero siempre ahí estaban esperándome.
Contemplando mi historia, sólo puedo quedarme profundamente sobrecogida por todo lo que el Señor ha ido realizando en mi vida, contando con mis debilidades, pecado de infidelidades. "Pero donde abundó el pecado, sobreabundó la GRACIA". Así, sigo peregrinando confiada en la misericordia y la bondad del Padre para conmigo.
Desde finales de febrero estoy en el Bañado Sur, queriendo compartir con mis hermanos este regalo del AMOR GRATUITO DE DIOS para con sus hijos, especialmente, los más pobres y olvidados de todos.
Un abrazo a todos los/as hermanos/as en la fe.
Paola:
Soy chilena, hermana de la hermana Mónica, Siervas de Jesús. Bueno, el Señor me trajo al PARAGUAY en diciembre del 2003 a un retiro con Carlos. Fue muy fuerte para mí, con mucha liberación y hasta ahora el Señor sigue trabajando en mí con mucha fuerza. En mayo del 2005 realicé mi segundo retiro con él. Este fue de mucha gracia para acoger mi verdadera realidad, lo cual el Señor va historizando en mí en el día a día. Ahora sigo en Paraguay en un Discernimiento Vocacional de mi vida con el Acompañamiento de Carlos y la ayuda de otras personas y comunidades que voy conociendo. Participo en la CAFA a partir de la jornada de enero del 2006. Ahora me encuentro en el Bañado Sur, Asunción colaborando con la clínica y prestando un servicio en lo que puedo en lo pastoral, compartiendo la vida con la comunidad de los Sagrados Corazones. Estoy abierta a lo nuevo que el Señor me regale.
Patricia O.:
Teresiana, chilena de origen y argentina por opción. Ingresé en la Compañía Santa Teresa de Jesús en marzo de 1982 en Montevideo - Uruguay (prenoviciado y noviciado). En diciembre de 1984 me fui a Buenos Aires para el juniorado, estuve en el colegio de Canning 4 años y en esos años, en 1986, fui a misionar a Neuquén. Fue tan fuerte la experiencia de Dios que viví en relación a la realidad de los pobres, que me conmovió y sacudió de tal manera por dentro, que comenzó en mí un proceso muy fuerte de búsqueda y de confrontación con nuestro estilo de Vida Religiosa.
En el año 1987 fui a misionar a Campana, Provincia de Bs. As., Barrio San Cayetano, donde realmente el Señor siguió regalándome su llamado de ir a vivir entre los pobres, y fue todo un tiempo de discernimiento y acompañamiento de varias personas que me fueron ayudando a escuchar en mi interior los llamados de Dios. Durante ese año nuestra presencia en el barrio fue los días sábado.
En el año 1988 tenía que regresar a Chile, porque sólo vine para los años de formación a la Provincia San José, pero toda mi peregrinación interior mostraba que no tenía que regresar a Chile, porque experimentaba que el Señor me estaba llamando a comenzar ese nuevo camino en el barrio, ahí fue difícil, porque las hermanas de Chile, por las necesidades de su provincia, no autorizaron que me quedara, entonces tuve que compartir ese deseo hondo con la Hna. Gral. de ese momento y se ve que captó que era llamado de Dios, porque tomó la decisión de dejarme en Argentina. Fue así que después de misionar tres años en Campana, en marzo de 1989 empecé junto a otra hermana a vivir una experiencia de inserción. En el Barrio San Cayetano estuve 11 años, ahí el Señor se encargó de hacerme experimentar lo que significaba compartir la realidad de miseria, exclusión del barrio, la violencia y la manipulación externa de los políticos, que no ayudaban a salir de la resignación a la gente. Trabajé un año en Zárate como maestra en un colegio diocesano y luego 7 años en la escuelita del barrio y 3 años como Orientadora Social en una escuela de la ciudad de Campana.
En el año 1990 hice mis votos para siempre en la capilla del Barrio San Cayetano; fui acompañada por bastantes hermanas, la gente del barrio y amistades de diversos lugares, mi mamá pudo estar presente y eso fue muy significativo para mí. El lema que elegí fue de Enrique de Ossó: "Pensar, sentir y amar como Cristo Jesús", y la frase de San Pablo: "Jesús pasó por el mundo haciendo el bien". En San Cayetano recibí mucha vida y los pobres me acercaron al Evangelio y me reafirmaron que valía la pena ser seguidora de Jesús. Dios me sostuvo en nuestra crisis provincial con los pies hundidos en el barro junto a los pobres.
Del año 2000 a 2006 estuve en Neuquén, donde se abrió una comunidad de inserción y estuve prestando el servicio de la coordinación general del colegio; allí supe en mi carne lo que era participar de la pasión de Jesús, fueron años donde recibí gracias costosas.
Durante los años vividos en Neuquén, participé con mi comunidad de interiorizaciones con Carlos junto a otras comunidades de Argentina y Uruguay, que fueron momentos de gracia para mí y la comunidad, porque el Señor me ha ido ayudando a soltar de a poco las riendas de mi vida a sus designios amorosos, han sido experiencias muy fuertes que me han sellado, conmovido y determinado a dejar que el Señor vaya habitando más mi persona y obrando de acuerdo a su querer.
También en esos años el Señor me regaló la experiencia de vivir los Ejercicios personalizados en Santa María de Fe con la Hna. Mari Carmen, en ese momento me sentía huérfana y recibí como gracia de Dios el sentirme hija amada de Dios desde siempre, llamada por mi nombre desde el vientre materno.
En el año 2003 toda la comunidad de Neuquén vivimos la experiencia de los ejercicios personalizados con Carlos en Santos Mártires, Paraguay. Marcaron un nuevo nacimiento, al entrar en la casa de Nazaret, al ser llevada por Jesús y María de su mano a todos lados. El haber compartido el Bautismo de Jesús y el ser bautizada me confirmó en mi identidad de hija amada y de discípula elegida y es donde me revela que mi misión será como la suya, que como El vive en mí, yo le deje manifestar la compasión y la bondad del Padre por los sencillos. Me sentí liberada de muchas esclavitudes y Dios me regaló una gran paz y gozo en el Espíritu, me experimenté una persona nueva, determinada a dejar obrar a Dios en mi vida cada día.
En el año 2005 vivencié los ejercicios personalizados en Asunción con Oscar. Dios me hizo gozar de poder ver su obra en mí y en mi comunidad en estos años y me hizo la promesa de que iría a otra tierra en peregrinación como Abraham, me dispuse a acoger en Fe lo que el Señor me fue mostrando con confianza. Me identifiqué con Abraham que le creyó a Dios. Me sentí parte de un pueblo que camina, que busca a Dios y me experimenté incorporada a la historia de tantas personas que son recordadas, porque creyeron en las promesas de Dios. En esa fe me vivencié pertenencia de Dios, atraída, seducida por el Señor.
En febrero de este año 2006 llegué a Resistencia – Chaco, y experimento que el Señor me está confirmando en la gracia del retiro del año pasado, que me afianza en la Fe con la fuerza del Espíritu.
En marzo 2006 el Señor me atrajo a participar de la CAFA y estoy muy agradecida, porque me hace vivenciar como parte de un pueblo santo, donde participo del ser propiedad de Dios.
Sarita:
Teresiana, estuve dos años en la Comunidad de San Juan Bautista, Misiones-Paraguay, etapa de discernimiento y/o profundización en el conocimiento personal y a las hnas. y carisma de la congregación. Entré en la Compañía Santa Teresa de Jesús en febrero de 1989. Aunque soy paraguaya, los tres primeros años de la formación (prenoviciado, noviciado) hice en Montevideo Uruguay; en el 2do. año de noviciado uno dos meses fui para la experiencia apostólica en Neuquén-Argentina. Luego de la primera profesión regresé a Paraguay, los dos primeros años de juniorado en Asunción. La primera comunidad a la que fui destinada al salir del juniorado, la comunidad de Asunción (Colegio Santa Teresa de Jesús). La 1ra. experiencia de retiro personalizado en Santa Rosa-Misiones, con la Hna. Tere, a partir de ésta, hasta ahora, todo personalizado, en alguna ocasión personalizado en comunidad. El Señor utilizó y sigue utilizando conmigo su Pedagogía de mucha ternura y en algún momento de mucha exigencia. La Voz del Padre que resuena en mi interior: "Hija, confía, confía...tú despójate y déjame ser en tu vida...". Hoy en actitud sobrecogida reconozco que Él sigue haciendo su obra, de bondad y gran misericordia. Pacientemente sigue podando y lijando asperezas. Un añito estuve en Caraguatay-Cordillera y en 1.995 nuevamente a la comunidad del Colegio de Asunción. De julio a diciembre de 2001 vivencié momentos fuertes de encuentro con el Señor, tiempo de GRACIAS, a través de las diversas situaciones y hechos concretos vividos en el proceso de formación de la tercera probación (1ra. parte en España luego continúa en Roma). Al regreso, ¡¡un cambio!!, un grupo de 6 hnas. fuimos a la Cdad., hoy, "Santa Teresa de Jesús”, en donde los dos últimos años me tocó compartir con 8 hnas., dos de ellas junioras. Prácticamente estuvimos compartiendo hasta enero de 2006. Por fin un nuevo destino (nosotras decimos "Sólo Dios Basta"), ahora a la Comunidad del Noviciado, en Mariano Roque Alonso - Paraguay. La actividad que se me sigue confiando "La Administración en el Colegio" y de noviembre 2.005 una nueva misión, formar parte de la Comunidad de Servicio Provincial.
Hace unos meses el Señor me escogió también para compartir vivencias y experiencias de Fe en la comunidad CAFA.
