viernes, 6 de abril de 2007

Los Seguidores Seran Perseguidos por mi Causa

Querida Comunida y Cuerpo Apostòlico quiero manifestarles una situaciòn que estoy viviendo junto a la hna Carolina en el Bañado sur porque siento que debemos orar mucho por esto y hacer fuerza, nosotras trabajamos en la clìnica Parroquial y carolina es la Coordinadora de esta clinica el poder del mal frente a las denuncias de injusticia y mentiras, le han causado a Carolina mucha cruz Ahora una parte de la gente esta pidiendo la renuencia de Carolina y la reestituciòn de un mèdico que el renunciò y mintiò, dijo de Carolina le habìa echado, el nombre de Carolina esta siendo desprestigiado en muchos aspectos y la situaciòn es sera, yo soy testigo de todo esto junto con la Comunidad Apostòlica del Bañado que la acompañamos y estamos con ella constantemente, ahora la Comunidad Apostòlica debe dar una respuesta de una carta que llegò y si esto no es beneficio para esa gente que pide esto la situaciòn serà cada vez màs seria, siento que esta situaciòn nos identifica con Jesùs en el texto de los demonios y los cerdos, esta situaciòn es fuerte y siento que era necesario para compartir y pedir sus oraciones, el Señor nos regala su paz en todo esto y el pedir por esta gente que tanto mal hace y es dominada por el espiritu del mal, tambien pedì perdòn al Señor por ellos que realmente no saben lo que hacen estàn enceguesidos por destruir y quedarse por lo que no les pertenece para dominar, esta gente esta acostumbrada a sacar a la gente que se interpone en su camino.
Sentimos con Carolina que Dios està muy presente en todo esto, caminamos en la fe y nos unimos al espìritu de Jesùs, que el nos guie en todo esto.
Bueno gracias por leer el compartir y cuento con sus oraciones, la vivencia que experimento es de mucha paz y apoyo sobretodo hacia carolina el orar por ella y esta situaciòn y siento esta gracia de la corresposabilidad para unirnos en el poder de la Oraciòn y Dios obre con fuerza junto con Marìa que sentimos que su presencia es muy importante frente al mal.
Unidas en la fe como cuerpo Corresponsal.
CAriños, Paola

El Espíritu sigue obrando

Queridos hermanos/as de peregrinación: gracias a cada uno (a) por su oración y en especial a los hermanos (as) que me van ayudando con sus valiosos aportes y resonancias, ¡ Dios les pague !
En esta última temporada el Espíritu del Señor sigue obrando...las podas siguen, sobre todo en la vida comunitaria. En mi interior voy percibiendo una mejor disposición para escuchar al Espíritu del Señor, sobre todo en la quietud...sí debo escucharle mejor en las actividades cotidianas, así que sigue siendo tarea en mí unir oración-fe y vida. En muchos momentos experimento debilidad, pequeñez, limitación, pero me abandono y dejo al Señor obrar. A veces ha sucedido que he tenido que decir una verdad a personas que imponen su criterio...antes sentía temor, ahora no...hablo y trato de discernir qué me mueve, en este caso decir una verdad, clarificar...muchas veces se mal interpreta mi actitud, y me tratan de fría de dura, pero no me cierro a estas hermanas, y ahí viene esta otra tarea que siento que me pide el Espíritu del Señor, ejercitarme en el amor gratuito, y esto es constante, dejar que el Señor exprese su amor ante estas hermanas y ante los pobres y enfermos que me toca antender, con los cuales debo dejar que Jesús exprese en mí su paciencia y comprensión. El Señor me va regalando su amor, sobre todo lo experimento en la oración, no a nivel sensible...sino en una mejor disposición para dialogar con El. Este amor de Jesús debo dejar que EL lo exprese gratuitamente en el día a día, especialmente con aquéllas personas que con sus palabras o actitudes me hieren, pero ahí entrego al Señor a estas personas y sus actitudes y va retornando la paz en mi interior. Hay días que siento también una gran desolación interior pero lo siento como una purificación y sigo adelante confiando en Jesús. Como ya le he dicho a El que me puede seguir podando , y sabe lo que necesito...sigo en apertura a la poda: soltar razonamientos, afectos desordenados, intereses personales...y DEJAR A DIOS SER DIOS EN MI VIDA, esto es diario, unas veces más consciente y otras menos. A cada uno le agradezco su oración en este proceso. Con cariño fraternal les saluda : Hna. Mónica

Ser madre de los pequeños/as.

Queridos/as hermanos/as :
Me comunico compartiéndoles que me puse de rodillas ante Jesús como el leproso, le pedí perdón por mi incapacidad de soltar la misión, y todo lo que me va desafiando en el día a día en ambos hogares: "Santa Teresita" y "San Javier".
Esta vez experimenté que Jesús me recibió con toda mi impotencia, frustración, cansancio y preocupación, porque no me siento escuchada por las autoridades de la Fundación San Javier; donde llevo la información de lo que sucede en los hogares.
Me afecta emocionalmente la vida de sufrimiento de niñas, adolescentes especialmente que en el hogar Santa Teresita, donde no pueden sentir que es su casa, quieren escaparse, se sienten en una cárcel, ya que los adultos no quieren o no pueden ofrecerles una vida que los lleve a crecer sanamente. Una vida con mayor libetad, respeto y valoración por parte de sus educadores/as.
Ante el clamor especialmente de las nenas, adolescentes, me siento llamada a hacer algo que provoque un cambio real y a veces caigo en la tentación de dudar si vale la pena luchar si nadie más se juega en esta situación.
Hoy sentí que tenía que entregar a Jesús la vida de las niñas/os, adolescentes, y vivencié que Jesús quiere un cambio en su vidas, y para esto me ayuda sentir a toda CAFA como cuerpo y a tantas personas que están comprometidas en dejar al Señor obrar en su vidas, que me fortalece y me mantiene en pie y me hace ver que no puedo abandonar, que me tengo que ocupar, pero de otra manera, dejándole al Señor obrar, arrojándome en sus brazos con los nombres y rostros de todos los niños/as de los hogares.
Experimento que como Abraham el Señor lo hace padre de una multitud de creyentes, a mí me convierte en madre de estos pequeños/as, confiando en que el Señor me ayudará a perder el miedo a jugarme por entero en seguir denunciando lo que es injusto y a servir a los más débiles, a ponerme de parte del que vive la angustia de la exclusión, el maltrato psicológico, el menosprecio y la indiferencia. Ante toda esta realidad dejar que Jesús muestre su rostro de ternura y bondad dede un amor incondicional, sin pedir nada a cambio.
Ahí me quiere Jesús, sólo que a veces siento que me está costando permanecer en sintonía con el Espíritu de Jesús y me desvío del camino, queriendo resolver desde mi misma y en estos últimos días el Señor me va haciendo experimentar que se lo tengo que entregar todo a su amor compasivo y clamar al cielo en solidaridad desde mi debilidad, del no saber y con humildad. ¿Señor, quiéres sanarme, limpiarme de mi misma?. Y dejar que Jesús me responda en la vida cotidiana de lucha. Lo quiero quedas libre de vos misma.
Un abrazo.
Patricia O.

UN DIOS DESCONCERTANTE

Muy queridos hermanos y hermanas: Hace ya unos días que sentía la necesidad de compartir con ustedes las vivencias que el Señor va permitiendo que acontezcan en mi vida, en la Comunidad, la misión...
Llevamos dos días viviendo un gran desconcierto: en esta ciudad pequeña y tranquila de Arrecifes, ha acontecido un hecho que nos dejó a todos desconcertados, tristes, agobiados, con miedo: han asesinado a una maestra, jubilada, de 61 años de edad, que aún seguía siendo profesora de Inglés en una escuela Técnica. Muy querida por la gente, soltera, vivía con su mamá. Familia muy respetada por sus valores cristianos en Arrecifes. Yo no llegué a conocerla, sí a una de sus hermanas. Aún no se sabe por qué, ni quién o quiénes: no le robaron, ni pideron rescate, le quitaron la vida a secas.
Hemos ido a rezar ayer a la Parroquia, se juntó muchísima gente en la Plaza, que casi no entraba en el templo y después fuimos todos en marcha silenciosa hasta su casa, allí acompañamos, desde fuera, a la familia rezando en la calle. Hoy fue la misa de exequias.
Para nosotras teresianas es una fiesta grande de familia hoy Día del Corazón de Jesús y aniversario de la Fundación de la Compañía: 130 años. Mientras me volvía a casa en el colectivo iba sintiendo cómo Dios sigue siendo desconcertante...Yo pensaba que hoy íbamos a poder decirles a la gente, que vamos conociendo, lo que significaba este día para nosotras y en cambio Dios se encargó de hacerlo a su manera. No importan los años de Fundación lo que importa es lo que"yo quiero de ustedes aquí".Sentía que el Señor me hacía ver que nuestra presencia en este momento es acompañar al pueblo en su dolor, hondo , profundo. Y sentía que nos dejaba en este día de su fiesta del Amor esa tarea: la de amar con misericordia, como Él, y lo que aún es más comprometido la de tener sus mismos sentimientos y ayudar a que otros los puedan tener...y no es fácil ante estos acontecimientos...Sólo Él puede ir transformando nuestro corazón, nuestros sentimientos en los suyos...He sentido todo el día la impotencia...Es difícil pedir justicia sin odio, ni rencor en lo más hondo del corazón...Esto es lo que le he pedido a Jesús que no tema seguirle con todas sus consecuencias y pueda ayudar a mis hermanos a lo mismo.
Sé que es Él quien obra en el corazón de cada uno y sé que cada palabra nuestra, cada gesto, es mirado, pesado, medido por los que nos identidifican como " Las Hermanas"por eso le pido a Jesús, de manera especial, la fortaleza y la valentía de vivir su amor misericordioso, que es también justo y comprometido con todos.
Cuando sentía deseos de compartir con ustedes, nunca pensé que fuera esto de hoy...
Les pido oraciones para acoger y vivir el amor del Señor en cada hermano y por cada hermano sea quién sea y ante lo que sea.
Gracias:
Lourdes stj
...

Cuando entré en mí misma...

DIOS ES MI PADRE, SOY DE DIOS

Dice Teresa de Jesús: “Una merced es dar el señor la merced, y otra es entender qué merced es y qué gracia, otra es saber decirla y dar a entender cómo es” V 17,5. Creo que hasta ahora no se me había dado esa gracia por eso no podía entender y captar lo que sentía en mí como enredo, desazón, desconcierto, frustración, deseos de huir.

La oración de estos días con un texto de San Enrique que llegó a mis manos y que habla de su confianza ilimitada de hijo amado, me tocó muy hondo y me consoló profundamente. Me invitó a una plena y total confianza en ese Dios Padre que ama con infinita ternura y que me cuida y anda solícito de mí.

Desde esta certeza del amor infinito de Dios Padre empecé a mirar mi interior, mis vivencias de este último tiempo. Necesitaba hacerlo antes de entrar en una profunda crisis de sentido y dejarlo todo.

Este año está siendo para mí muy cargado, con gracias realmente costosas y dolorosas. El Señor me ha confiado mucho, me ha puesto como “mediación suya”: en el colegio al volver a renovar mi presencia en la dirección; en la Provincia al pedirme el servicio en el Consejo Provincial en un momento delicado para la Provincia; en la Comunidad al pedirme el servicio de la coordinación con mis hermanas y se me difícil saber para donde tirar.

Asumí estas responsabilidades, por un lado, con la gran certeza de ser una misión recibida de El para servir mejor a mis hermanas y a los demás. Pero también, por otro lado, quizás más oculto, con una gran confianza en mis propias capacidades, cualidades y habilidades para llevar adelante todo, porque sentía y creía que YO PODIA con todo y que lo iba a hacer muy bien.

Sin embargo con el paso del tiempo solo me voy encontrando con mis incapacidades, mis inutilidades, mis limitaciones y deficiencias, mis desconciertos, fragilidades y carencias. No puedo con nada, no soy capaz de nada por mí misma. Experimento ante mí un profundo fracaso. Y esto me está costando muchísimo aceptar. NO era tan fácil como yo pensaba, no depende sólo de mis habilidades y capacidades. Eso no sirve para nada y yo creía que sí. Recién ahora empiezo a dimensionar mi GRAN PROTAGONISMO, mi creerme y mi andar convencidísima de ser yo la “estrella”. Sin embargo, lo que me está pasando es que me voy estrellando.

Me siento tan llena de máscaras, tan llena de orgullo, vanagloria y soberbia. Por eso todo me duele, me duele que ahora la gente empiece a rechazarme, sobre todo aquellos por quienes era querida y acogida, no tolero el desprecio, no aguanto que me digan: “me defraudaste”, no soporto que me ignoren, no resisto que descubran mis carencias y debilidades.

Me cuesta ir descubriendo que no era “tan valiosa” o “tan capaz” como yo pensaba, que no puedo cambiar nada, que no puedo conducir nada.

Reconozco que tengo que abrirme y dar paso a los otros, que tengo que ver que los otros pueden más que yo, que no soy la UNICA, que no soy la todopoderosa. Carmen no es dios, Carmen no puede con todo. Carmen no es la única valiosa... (qué soberbia más grande la mía)

Esta conciencia de mi limitación, de aceptación y acogida de mi incapacidad ha hecho que entre en crisis existencial, que pierda el sentido de muchas cosas, que me rebele interiormente.

La conciencia de todo esto juntamente con mi no querer asumir esta realidad nueva en mi vida, incluso me ha llevado a un cierto distanciamiento de Jesús, a regatear mis tiempos de estar con El y a buscar cosas para evadirme y refugiarme. Incluso he estado quejándome de una sequedad y frialdad en mi oración que me ha llevado a no querer orar por no encontrar “el gusto”, por no poder “sentir” y “entender” lo que me estaba pasando.

Todo esto me ha hecho centrar mucho en mí y me ha apartado de la gracia de la Comunidad, de la CAFA, del sentido de Cuerpo Apostólico, pero lo peor, es que me ha “debilitado la fe”. Dejé de creer en El, dejé de vivir mi experiencia creyente. Todo he puesto en dudas, todo me caía mal. A todo le encontraba excusas para no dejarme tocar por El y enfrentarme con esta realidad en mi vida. En varios momentos hasta me planteé dejar la CAFA, el equipo, el acompañamiento, todo.

Siento que ahora es un nuevo momento para mí. Momento de maduración en la fe y de acogida de mi barro, de mi pobreza. Me siento como San Enrique en su oración “yo soy mendigo y pobre”. Soy mendigo porque he mendigado mucho: afecto, atención, compasión, reconocimiento de mi valor, aceptación. He querido ser víctima de esta situación para seguir atrayendo a los otros hacia mí. Pero, ya es el momento de decir BASTA. Es hora de MADURAR EN LA FE desde lo que soy y vivir en RADICAL CONFIANZA en mi Padre que me ama, me cuida, me mima, me da lo mejor. NO puedo seguir enredada en todo esto porque me va debilitando en mi interior, en mi entrega.

Siento que a partir de ahora empieza una nueva vida sin ropajes, sin máscaras. Una vida desde mi radical pobreza. Acogiendo lo que Dios me da así como me da. Ya no me importa que El cambie mis planes, mi organización, lo que la gente piensa de mí, que me desmorone delante de los otros.

Quiero vivir cada instante sabiendo que lo que acontece viene de Dios, El quiere mi bien.

Quiero estar con mucho gozo y alegría en todos los acontecimientos, agradables o desagradables. No importa, todo viene de sus manos de Padre. En este momento siento renacer en mí una infinita confianza en mi Padre Dios. Me siento en paz.

Experimento acogida de mi realidad. Una acogida serena, confiada. Me alegro de sentirme así “mendigo y pobre” porque ahora estoy preparada para dejarme conducir por El en verdad. Creo que ahora El puede empezar a construir en mí, hacerme a su gusto. Bendito sea Dios por su obrar.

Escribo ahora un pequeño extracto de la oración de Enrique que me animó a adentrarme en mi interior y nombrar lo que pude nombrar:

“Dios se ha encargado y tomado cuidado de mí y de todas mis cosas;
no me faltará nada.
YO soy mendigo y pobre.
Dios anda solícito y cuidadoso de mí.

Quiero, Dios mío, hacer con Vos aquel concierto admirable
que hizo vuestra sierva Teresa de Jesús.
Quiero olvidarme de mí
y dejar mis trazas y cuidados para acordarme de Vos
y fiarme de Vos solo.

NO quiero sentir aquellos alborotos
y congojas y desasosiegos
que sienten los que miran las cosas y los sucesos
con ojos de carne,
sino antes estar con mucho gozo y alegría
en todos los acontecimientos.

NO quiero, pues tener zozobra
ni perder mi quietud y sosiego
por los diversos sucesos y acontecimientos de la vida,
porque sé que ninguna cosa puede acontecer sin la voluntad de mi Padre celestial...

Pido sus oraciones,
Ma. Carmen B.

Discernimiento

Mis queridos hermanos y hermanas en la fe:

Desde el Espíritu de comunión que existe entre nosotros, quisiera compartir aquellas vivencias más fuertes que el Señor me regala. Estas vivencias están centradas en el Amor de Cristo en unión de corazones con cada uno, como Cuerpo. Hace aproximadamente un mes, como Compañía de María en la Delegación de Paraguay, hemos tenido la visita de Beatriz, nuestra madre general y de Rita, miembro del equipo general. En esta ocasión he recibido una propuesta de iniciar un discernimiento de misión, de envío a la comunidad del Cairo, Egipto. Desde que Beatriz expresó su deseo de que fuera a fortalecer nuestra presencia como congregación en el próximo Oriente, se inicio en mí un proceso de búsqueda del querer de Dios. Beatriz hizo una consulta con el equipo de provinciales del cono sur, con hermanas de la Delegación y tuvo un diálogo conmigo. Desde entonces el Señor ha puesto en mi corazón un movimiento de su Espíritu. Se me confirmó desde el principio que detrás de este pedido está el Señor, quien comenzó en mi interior a hacer su obra, llevándome una vez más por caminos de fe, desprendimientos y despojos. En todo momento he sentido confianza y una paz serena, apertura y disponibilidad para mi Dios, que me brota únicamente de su Amor. Como dice el texto que he rezado estos días (1Rey 17, 1 al 6): "Levántate y dirígete hacia el oriente, te esconderás cerca del torrente." Ante estas palabras del Señor me siento tocada, me queda dejarme conducir, pues al Señor le pareció bien que esté unos días cerca de este mundo tan nuevo y desconocido para mí. Siento la llamada de nuevo de salir de mí, de nosotros CAFA, CAF Misiones. Es la gracia del hoy: escondida bajo el torrente, que es el Espíritu de Jesús. No sé lo que el Señor me tiene y nos tiene preparado.
Me encomiendo a sus oraciones durante estos días que estoy en el Cairo, conociendo la misión de la Compañía, de la vida religiosa, de la Iglesia en continua relación con otras Iglesias como la ortodoxa cristina no católica y la musulmana.

Un abrazo,
Fidelina

Magnificat de Mari Carmen

Queridos todos/as:

De una forma especial quiero agradecer a Paola, Beatriz, Mónica, Hermelinda, Lourdes, Máximo, Carolina, Oscar las resonancias a mis compartires; no saben la ayuda tan grande que es para mí, se lo agradezco profundamente en el Señor. Mando a todas/os el Magnificat que compartí en la comunidad ayer, recogiendo, con María, las gracias de estos años en Cuba: Celebra todo mi ser tu grandeza, Señor, y mi espíritu se alegra en vos, mi Dios, que me salvas. Porque quisiste fijarte en mí, tu esclava: débil, miedosa, pecadora, arrancarme del Pueblo Santo del Paraguay y transplantarme a Cuba. En verdad, es obra tuya, Señor, que tienes poder para realizar tus proyectos e hiciste grandes obras en mi favor: Fortaleciste mi fe en vos, mi Único Absoluto; me quitaste todo apoyo espiritual y me sostuviste en tiempo de huracanes. Reconozco que Santo es tu Nombre. Me concediste la Gracia de que Jesús y el Reino sean lo único que me "quema" dentro. Ni hacer mucho, ni brillante, ni aparentemente eficaz es lo que me ha movido en la Misión. Sólo el que Cristo viva en mí y yo en El, dejándome conducir por el Espíritu. Derribaste mi protagonismo en todo lo que he vivido. Me has hecho sentir hambre de Justicia y de alimento espiritual (de CAF, de escuela de formación, de santidad, de vivencia de Pueblo Santo, de EE.EE. personalizados...), de todo lo que tenía en Paraguay, pero me has dado en tu Iglesia tu Cuerpo y Sangre, tu Palabra y tu Espíritu que me han sostenido y fortalecido en mi peregrinación en la fe desnuda, despojada de Jesús en la Cruz. Me has dado la oportunidad de anunciarte, de darte a conocer a mis hermanos, de enseñarles cómo se vive en tu seguimiento en fe radical y en Comunidad Cristiana y la alegría profunda de sentir que les concedías la fe radical y la acogían, me has dado hermanas/os en la fe, amigos en el Señor, y me has dejado ver una semillita, como un granito de mostaza, de Pueblo Santo cubano. Me has acompañado con el compartir solidario, en la corresponsabilidad en la Santidad de l@s hermanas/os del Paraguay. Me has podado y corregido, como un papá a su hija, para irme introduciendo más plenamente en tu vivencia de Comunión con tu Hijo en el Espíritu Santo, Agua Viva, Felicidad colmada, Vida abundante, Paz, Descanso profundo. Esta es la Promesa que hiciste a Abrahán y a su descendencia para siempre. Te doy gracias por esta tierra cubana, por lo que has hecho en mí y conmigo, por los caminos por los que me has llevado, por las mediaciones de que te has valido, por todas las cosas que me han hecho sufrir, por las privaciones que me has hecho pasar. Todo es obra tuya cumpliendo la Promesa que nos hiciste como Pueblo Santo del Paraguay: "Te voy a poner como una luz para el mundo para que mi Salvación llegue hasta el último extremo de la tierra" (Is. 49) y "mi canal se convirtió en río y el río en mar" (Ecl. 24; 31b). Den gracias al Padre, en Jesús, con María y conmigo.

Un abrazo,
Mari Carmen E.

GRACIAS SEÑOR PORQUE ME SIGUES PODANDO

Queridos hermanos /as en Jesús: Me alegra nuevamente poder compartir con ustedes lo que el Señor va obrando en mi vida...En este último mes las podas siguen y el Señor, por medio de mis hermanas de Comunidad, de peregrinación en fe, me va mostrando engaños que han surgido. Mucho ha aparecido esta temporada, engaños con apariencia de bien. Jesús me va mostrando los afectos desordenados y así ha ido cortando muchas amistades, innecesarias en mi proceso. He ido cortando por gracia de Dios. Va podando mi sensibilidad respecto a la opinión de los otros, que hablen mal de mí, me critiquen, no me comprendan, he descubierto mi apego a mi imagen, en fin me voy quedando sola congregacionalmente, o con sospechas sobre mi persona...La poda sigue, gracias a Dios y se la sigo pidiendo...Me va mostrando el Señor tantas decisiones tomadas desde mí y no desde el Señor, cuánto DISCERNIMIENTO FALTA EN MI VIDA DIARIA, el unir FE Y VIDA...manejar situaciones desde mí y no dejar a Dios ser Dios. Me he ido buscando a mí misma, mis intereses y no he discernido los intereses del Señor. El Señor me sigue pidiendo SOLTAR, Y CONFIAR EN EL, dejar que EL se manifieste . Ahora me voy sintiendo más libre...pero la poda sigue pues en mi persona hay mucho que podar...buscar los intereses de Jesús. También en la oración, que he podido hacer con más detención esta temporada...Jesús me muestra que es necesario en este peregrinar esos ratos de intimidad con El donde nos da su luz para ver engaños y seguir con las podas que nos van llevando más a Él. Agradezco a Carlos y cada uno de ustedes el compartir y resonancias que han hecho, gracias por su corresponsabilidad, todo me va ayudando en mi proceso y me da luz para ver por dónde hay que seguir peregrinando en esta fe radical a Jesús. Cuenten con mi oración. ¡ FELIZ DÍA DE PENTECOSTÉS !Con cariño les saluda en Jesus: Hna. Mónica

Caminar en correspondencia con la Gracia: amor gratuito, alegría perfecta y un solo cuerpo en el corazón de Cristo.

Mis queridos hermanos:
Impulsada por el amor compasivo de Dios les comparto con alegría su ternura y firmeza. En primer lugar quiero manifestarles simplemente en este espacio mi gratitud de corazón por las oraciones y resonancias que han expresado a mi compartir que se llama: “Inicio y nacimiento de una gran novedad del Espíritu...1 de abril, 98”. Ha sido muy valioso pues tuvo repercusión no sólo para mí sino para mi entorno de familia religiosa y de vida consagrada.

En aquel entonces les he manifestado que, movida por la acción del Espíritu retorné a dicha experiencia de retiro del 98, siento que la tengo a flor de piel. ¡Era precioso! volver a vivir la experiencia, porque me hizo revivir y brotar, surgir y emerger otras experiencias espirituales mucho más fuerte, principalmente para el momento actual de ese entonces en relación a mi persona, a la CAFA y a la misma misión dentro de mi familia religiosa. Sobre todo el Señor me hizo ver con tanta ternura lo equivocada que estaba caminando en algunos aspectos de mi vida como no queriendo acoger pequeñas y grandes marginaciones, incomprensiones, me era difícil acoger lo que a mi entender era tan sencillo y práctico. En medio de esta realidad mi Señor me decía: “Soy Yo quien debe marcar y garantizar con mi Gracia el paso y el cambio en ti y en las demás personas”.

Humildemente reconozco que dejé espacio a las sutilezas o habilidades del mal que me quiso apartar del ámbito del amor gratuito. Pero lo importante es que Dios salió a mi encuentro!!! También quiero mencionar que hubo hermanos que con un gran amor gratuito me ayudaron con sus resonancias a tomar conciencia de lo que me estaba pasando y a seguir la marcha ya emprendida... Igualmente en la página blog por ejemplo, estando en esa situación, leí y oré sobre las experiencias de Mari Carmen, de Lourdes; ambas vievencias me conmovieron y me impactaron muchísimo. Ciertamente leer y gustar de tales experiencias depende de la disposición con que recibimos o acogemos tal o cual aporte. He ahí, que siento la grandeza de este espacio de compartir entre nosotros.

En toda esta experiencia el Señor me fue pidiendo disposición interior, silencio fecundo y tiempo para colaborar con El - porque al inicio era todo oscuro - pero gracias a estas actitudes y sobre todo por su gran compasión misericordioso pudo ser arrancada, podada lo que a veces caprichosamente lo guardo conmigo y que se manifestaba en ciertos momentos con mis hermanos.

Lo que también quiero confirmar una vez más, sobre todo con esta experiencia vivida, que el Señor fundamentalmente nos habla y nos comunica su vida por medio de cada uno de nosotros (eso pasó conmigo).

Verdaderamente, el Dios de la Vida me dio nuevo alcance, nueva oportunidad y nuevas orientaciones a lo que estaba viviendo, nuevas luces para darme cuenta de mis resistencias a vivir A FULL la gracia de la perfecta alegría y el amor gratuito. Una vez más me aliste a esta caminata apoyándome en este punto tres de nuestra interiorización: Dios, sin embargo, llama a la CAFA a ser santo. … en la medida que sea Cristo quien viva en nosotros. Gál.2,20.

Por último les comparto sencillamente lo que alguien me resonó por el camino: “Hermelinda, si quieres crecer en conversión, el camino seguro es pedir poda, humillaciones y la gracia para que redunde en crecida humildad y amor gratuito y además desconfiar de ti misma y confiar sólo en tu Dios sin apartarte de las mediaciones humanas que el Señor pone en tu peregrinación en fe radical”.

Queridos hermanos, que el Amor de Dios y la Pasión por nuestro amado Señor, sea la única razón para seguir peregrinando y apostando por una vida religiosa desde el corazón y proyecto de Dios.

Gracias por ser parte de esta aventura en el Espíritu de Dios. Y verdaderamente este tiempo ha sido para una nueva vida en el Espíritu de Dios por pura gratuidad de El. Unidos en el abrazo del Padre en Jesús y María. Hermelinda