lunes, 12 de mayo de 2008

Las brasas del Espíritu

Queridos hermanas/os:

Como las pisadas en la playa que la marea se lleva,
así experimento mi proceso.
No puedo nombrar nada.

Solo me queda esta certeza, en la fe,
como una brasa encendida en medio de la oscuridad:

Xto está vivo, resucitado y actuando por el Espíritu,
en mi, en el PS y en el mundo,
de forma misteriosa y admirable para mi.

Algunas veces se me entrega en la experiencia de fe radical de personas sencillas,
como una que me decía:
yo no exijo nada a Dios, qué le voy a exigir, si El me da todo y sabe lo que me conviene... si es doloroso, ya Jesús nos dijo que teníamos que sufrir como El... yo solo acojo lo que me da cada día...

La mayoria de las veces no veo nada,
pero creo y gozo de esa alegría de los que creen sin ver.

Este es mi momento y lo que les puedo entregar.
Unidos en el Amor del Señor
M.Carmen

6 comentarios:

Carlos dijo...

Mi querida hermana, qué más puedes esperar de tu Señor. Si el Espíritu te lleva a su modo sin decirte cómo, cuándo, a dónde, entonces bienaventurada eres; pues así Dios trata a sus preferidos.

Lourdes dijo...

Gracias Ma.Carmen por tu fidelidad al Señor, por acoger en fe lo que a Él le parece bien para vos. Que Él siga siendo para vos el que orienta tu caminar según al Padre le plazca. GRACIAS POR AYUDARNOS A NO OLIVDAR QUE ES EL QUIEN NOS CONDUCE A SU MODO

Sarita D. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Sarita D. dijo...

Me dejé impactar por la acción del Espíritu en tu vida, qué mujer libre eres. GRACIAS por entregarnos generosamente las gracias recibidas, me enseña tu testimonio de apertura y docilidad a la acción del Espíritu Santo, lo que arde en tu corazón arde también en lo nuestro; siento que arde en nosotros el AMOR de buen Dios Madre y Padre.
M. Carmen solo te conozco virtualmente y tu compartir de experiecias de Dios y vivencias de fe van calando y tejiendo en mis fibras más profundas afectos entrañables en el corazón de Cristo Resucitado.
Gracias, gracias; querida hermana
Abrazos afectuoso en Jesús
Sarita

Beatriz dijo...

Mary Carmen muy querida: ¡Cómo te ama el Padre,el Hijo y el Espíritu!, lo experimento reflejado
en tu compartir.
Por ello doy gracias a la Trinidad, convencida que los Tres se están gozando en tí, cuentan contigo...te necesitan así, y nosotros tus hermanos de peregrinaje también.
Un abrazo inmenso,muy unida a tí
Beatriz stj.

Fidelina dijo...

Muy querida Carmen

De tu compartir me resuenan estas palabras:"yo no le exijo nada a Dios, qué le voy a exigir. Si El me da todo y sabe lo que me conviene… Si es doloroso, ya Jesús nos dijo que teníamos que sufrir como El”. Esta vivencia me une al pueblo santo, me conforta y me anima a seguir caminando con un corazón agradecido a Dios.

El Señor te está regalando la Gracia preciosa de los sencillos de corazón: la fe como una brasa encendida en medio de la obscuridad.

Es tiempo de abandonarse, simplemente, como un niño en los brazos tiernos de su madre-padre.
Dejándote abrazar por el pequeño calor que se desprende de las brazas encendidas.

Gracias por tu compartir
Unidas en este mismo Espíritu de Jesús.
Fide