jueves, 20 de diciembre de 2007

El regalo que Jesús me da, para regalar en Navidad

El Espíritu me mantiene, como gracia sostenida, en Cristo crucificado,
participando de su momento de oscuridad y despojo,
de su fe radical en la fidelidad del Padre,
de su amor y entrega hasta el extremo.

Mi “extremo”, en el amor, siempre es limitado y “corto,”
el del amor del Señor es siempre mayor,
así voy aprendiendo a amar en El, como El,
y al mismo tiempo voy “conociendo” internamente su Amor hasta el extremo,
en su entrega por mi y por toda la humanidad.

Esto, vivido en el acontecer de cada día,
en las fidelidades sencillas y pequeñas,
que según Jesús,
preparan las grandes fidelidades;
en los acontecimientos dolorosos, sorpresivos,
como el de la muerte de nuestras hermanas;
en la vida comunitaria; en la misión,
sin esperar otra suerte que la de mi Señor…

Que en esta Navidad, el Amor de Jesús,
abajado, pequeño, humilde, extremoso,
llene nuestro corazón y lo transforme.
Y lo mantenga en ese amor de unos para con otros y con todos, en el año nuevo.
M.Carmen

3 comentarios:

Blanca Patricia dijo...

Querida M. Carmen:
Gracias por seguir reflejando el amor de Dios, paciente, siempre mayor, grande... sublime y dejarle manifestarse en tu vida. Dios que se manifiesta en lo pequeño y sencillo de cada día, todo de acuerdo al obrar del Padre.
Pido para ti la Gracia de seguir sostenida a su amor, puro y fiel y caminar hacia donde El te lleve siempre.
Un abrazo fraterno.
Blanca stj

Mónica dijo...

Querida Mari Carmen:
En tu compartir me ha llevado el Espiritu a alabar al Padre por revelar "sus secretos a los pequeñitos, sencillos, a los humildes de corazón..."
Es una gracia muy grande estar unida a Jesus, ser una con Jesús por medio de la cruz, del despojo, de la oscuridad...
Gracias Mari Carmen por ser fiel a las gracias que el Padre te va dando, en tu escucha y docilidad diaria al Espiritu Santo. Ora por nosotros (as) que estamos más atrasados (as) en la carrera...
Gracias por tus saludos en esta Navidad y nuevo año que Dios nos regala.Recibe también mi abrazo para estas fiestas tan especiales.
Fraternalmente: hna. Mónica

Fidelina dijo...

Querida Carmen

Gracias por compartirnos la vivencia del Amor de Dios hasta el extremo. Este amor que es manantial inagotable y a la misma vez es la pequeña gota de lluvia que empapa nuestro cotidiano vivir. Me llega mucho la Gracia de permanecer sostenidas en la fe y fidelidad de Jesus en su Padre.Esta experiencia espiritual da "asiento" al alma.

Le pido al Señor que te mantenga en El pobre y humillado, siga transformandote con amor en su Amada. Ser participes de este proceso de identificacion con el Hijo, de santificacion por la fe radical en Jesus crucificado es un regalo que se te va desvelando. Demos gracias a Dios con Maria por tantas bendiciones que no merecemos!

Que este regalo lo disfrutemos toda la CAF en dispersion.Un abrazo grande en union de corazones; como un solo cuerpo apostolico.
Fide