Mi Señor es fiel

Hace un tiempo que vivo muy ocupada y preocupada con la facultad, el estudio es una misión que vivo con paz y esperanza en mi Señor. Me llegan momentos de alegría, de compartir la fe, la vida y la misión con los compañeros, también vivo momentos de tristeza, soledad y sentimientos de fracaso y torpeza.
En la oración y en la vida hay veces que me siento lejos de Dios, me inunda nostalgia de mi Señor, necesidad urgente de estar con Él, escucharle y conversar con Él. Las horas, los días y la vida pasan y yo no tengo tiempo para nada, nada puedo, no hago nada.
Agradezco al Señor por la CAFA, es el contexto donde el Señor me hace sentar y tomar conciencia de la vida en el Espíritu, la comunión en la fe, la gratuidad conmigo misma y con los hermanos. Esto me da vida en el día a día y me toca decir SI al Señor aunque no entienda nada.
Agradezco a las personas que me cuestionan y me quieren ayudar a vivir la fe, la aventura en el Espíritu, ahora reconozco y acojo que son los momentos en que el Señor se me acerca, me abraza y quiere estar conmigo. Y yo, mi cabeza muy ocupada, me digo a mi misma “no puedo con muchas cosas, soy torpe”, la realidad en la facultad y en la casa me lo confirman “vos sos torpe”

En cuanto a la página, me molesta que muchas personas que no les interesa, ni se comprometen con el proceso tengan acceso a ella, así se verifica que tengo facilidad y cabeza para enredarme con el enemigo, menos para escucharle a mi Señor ni para otra ciencia.
Yo creo que el Señor dijo: “ahora me toca a mí”, estoy enferma y de reposo, tengo tiempo para rezar, en un principio me preocupé, no sé si voy a perder el semestre, estaba en la última semana de exámenes.
Muchas gracias por escucharme y cuento con sus oraciones.
Marisa