viernes, 6 de abril de 2007

Magnificat de Mari Carmen

Queridos todos/as:

De una forma especial quiero agradecer a Paola, Beatriz, Mónica, Hermelinda, Lourdes, Máximo, Carolina, Oscar las resonancias a mis compartires; no saben la ayuda tan grande que es para mí, se lo agradezco profundamente en el Señor. Mando a todas/os el Magnificat que compartí en la comunidad ayer, recogiendo, con María, las gracias de estos años en Cuba: Celebra todo mi ser tu grandeza, Señor, y mi espíritu se alegra en vos, mi Dios, que me salvas. Porque quisiste fijarte en mí, tu esclava: débil, miedosa, pecadora, arrancarme del Pueblo Santo del Paraguay y transplantarme a Cuba. En verdad, es obra tuya, Señor, que tienes poder para realizar tus proyectos e hiciste grandes obras en mi favor: Fortaleciste mi fe en vos, mi Único Absoluto; me quitaste todo apoyo espiritual y me sostuviste en tiempo de huracanes. Reconozco que Santo es tu Nombre. Me concediste la Gracia de que Jesús y el Reino sean lo único que me "quema" dentro. Ni hacer mucho, ni brillante, ni aparentemente eficaz es lo que me ha movido en la Misión. Sólo el que Cristo viva en mí y yo en El, dejándome conducir por el Espíritu. Derribaste mi protagonismo en todo lo que he vivido. Me has hecho sentir hambre de Justicia y de alimento espiritual (de CAF, de escuela de formación, de santidad, de vivencia de Pueblo Santo, de EE.EE. personalizados...), de todo lo que tenía en Paraguay, pero me has dado en tu Iglesia tu Cuerpo y Sangre, tu Palabra y tu Espíritu que me han sostenido y fortalecido en mi peregrinación en la fe desnuda, despojada de Jesús en la Cruz. Me has dado la oportunidad de anunciarte, de darte a conocer a mis hermanos, de enseñarles cómo se vive en tu seguimiento en fe radical y en Comunidad Cristiana y la alegría profunda de sentir que les concedías la fe radical y la acogían, me has dado hermanas/os en la fe, amigos en el Señor, y me has dejado ver una semillita, como un granito de mostaza, de Pueblo Santo cubano. Me has acompañado con el compartir solidario, en la corresponsabilidad en la Santidad de l@s hermanas/os del Paraguay. Me has podado y corregido, como un papá a su hija, para irme introduciendo más plenamente en tu vivencia de Comunión con tu Hijo en el Espíritu Santo, Agua Viva, Felicidad colmada, Vida abundante, Paz, Descanso profundo. Esta es la Promesa que hiciste a Abrahán y a su descendencia para siempre. Te doy gracias por esta tierra cubana, por lo que has hecho en mí y conmigo, por los caminos por los que me has llevado, por las mediaciones de que te has valido, por todas las cosas que me han hecho sufrir, por las privaciones que me has hecho pasar. Todo es obra tuya cumpliendo la Promesa que nos hiciste como Pueblo Santo del Paraguay: "Te voy a poner como una luz para el mundo para que mi Salvación llegue hasta el último extremo de la tierra" (Is. 49) y "mi canal se convirtió en río y el río en mar" (Ecl. 24; 31b). Den gracias al Padre, en Jesús, con María y conmigo.

Un abrazo,
Mari Carmen E.

6 comentarios:

Máximo dijo...

Querida Maricarmen:
Me uno a vos junto con la CAFA para celebrar todos juntos tu MAGNIFICAT!!!. Muchísimas gracias por esa alabanza que haces junto con María al Padre en el Espíritu de Jesús. Me toca hondo tu vivencia y nos ayuda un montón, justamente para tomar más conciencia con nuestros hermanos y hermanas que están en la diáspora viviendo la fe radical en Jesús como Cuerpo suyo en Amor gratuito. El Señor nos une desde El para vivir su Santidad en cualquier lugar donde estemos. Un fuerte abrazo y bienvenido a sudamérica.
Unidos en el Cuerpo amoroso de Jesús. Un fuerte abrazo, de tu hermano Máximo.

Paola dijo...

HOLA Mari carmen:Junto con MARÍA me uno en Alabanza al PADRE por la gran obra que el realiza en tu vida a través de sus vivencia en tu vida. Experimento una vida que se deja conducir por su Señor, y siento mucho agradecimiento al Señor por la Vida profunda de unidad con su hijo Jesús que cada vez te va configurando más con él, por puro amor, siento como el Señor sabe lo que necesitamos para fortalecernos en la fe, caminar, desde su espíritu y dejarnos podar en sus manos llenas de Amor por sus hijos, el depender totalmenteen el querer del PADRE y el realiza sus maravillasen ellos, sólo el sabe lo que necesitamos para seguir creciendo en él.Lleva mi Vida PADRE y hazla como te parece bien. Abandono profundo en el que sabemos que nos ama. MUCHO Animo y que el Señor te siga fortaleciendo en él desde su vivencia en ti. unidas en la peregrinación.

Lourdes dijo...

Mari Carmen:
¡¡GRACIAS!!Gracias por tu fidelidad al Señor en todo lo que Él te ha regalado vivir... Gracias por que nos mostrás que es posible seguir a Jesús asumiendo su misma suerte, reconocer que todo , aún lo costoso es puro don gratuito de Él, que mira la pequeñez de su servidora y se goza con ella por su humildad.
Mari Carmen el Señor te ha regalado además el don de poder compartirlo y el bien que Él hizo en vos se multiplica y llega a tus hermanos y hermanas más allá de los mares...porque en Él no hay distancia.
Gracias porque tu Magnificat reentusiasma mi vida, la entrega, las ganas de seguir viviendo desde la fe radical sin oponer resistencias al Señor que tan admirablemente nos ama y regala.
No concozco tu rostro (físico) pero me vas mostrando tu espíritu y le doy gracias al Señor que nos pone en este "camino de fe" y modo de compartir cibernético, que va alimentando nuestro espíritu y su Promesa de estar siempre con nosotros la cumple de mil modos insospechados.
Sigo rezando por vos para que el Señor te sostenga en esa fidelidad costosa y también gozosa.
Unidas en Él
Con inmenso cariño:
Lourdes

Carolina dijo...

Querida Mari Carmen.
Yo también empiezo devolviéndote tu expresión: “¡No sabes la ayuda tan grande que ha sido para mí y que es para nosotros tu Magnificat que nos compartes!, no podemos dejar de unirnos a tu canto de alabanzas porque es Grande nuestro Dios, que ha retratado en tu espíritu la imagen de su Hijo, recorriendo de nuevo su itinerario de fe, de anonadamiento, de humildad, de pequeñez en tu vida. Mas allá de la expresión es admirable, ese proceso de la muerte del grano de trigo que cae en la tierra…lento, silencioso, que va transformándose al ritmo de Dios. Muerte a todo protagonismo, despojada en tu fe, quedando el Señor como el Único, el Absoluto, generando vida, Vida en el Espíritu con el dinamismo y la fuerza propia del TODO SANTO, que escapa a todo control humano y que es fruto de su Misterio Pascual por el cual Cristo Glorifica al Padre. Yo me uno con el Pueblo Santo a esta Glorificación de Jesús al Padre por haberte escogido para colmarte de su presencia, y ser así Luz en ti, y que su salvación llegue hasta el confín de la tierra. En todo este tiempo has bebido de su Amor Absoluto, el que sacia totalmente toda sed y te ha convertido en Manantial del que mana torrente de agua viva del que todos somos beneficiados. Que el Señor te siga colmando de bendiciones y que su obrar sea pleno en ti para gloria de su Santo Nombre.
Con gran cariño: Carolina.

Beatriz dijo...

Muy querida Mari Carmen: GRACIAS de todo corazón por compartirnos el "hacer de Dios" en tí a través de tu Magnificat.
Alabo y adoro a la Trinidad Santa que te habita por lo que va haciendo en tí y de tí "fortaleció tu fe en El, tu único Absoluto; te quitó todo apoyo espiritual y te sostuvo en tiempo de huracanes; te concedió la Gracia de que Jesús y el Reino sean lo único que te
"quema" dentro;
Te ha regalado alimentarte y sostenerte con su Cuerpo y su Sangre, con su Palabra y su Espíritu.
Te ha regalado la oportunidad de anunciarlo de darlo a conocer, a amarlo y seguirlo "...
Hago mío tu Magnificat y de nuevo alabo y adoro a la Trinidad que vive en tí y que te tiene DENTRO de Ella.
Y a tí hermana querida te doy las gracias porque experimento que tu vida es una alegria y un descanso para nuestro Dios y una bendición para todos tus hermanos y hermanas.
De nuevo GARCIAS. Con todo cariño
Beatriz

Mónica dijo...

Querida Mari Carmen: te agradezco profundamente el Magnificat que nos has compartido, me sacudió hondamente, me emocioné. El Espíritu del Señor me llevó a bendecir al Señor :
Te alabo y te bendigo Padre porque has revelado "estas cosas" a los "pequeñitos", Sí Padre así te pareció bien. Te alabo porque la gracia de la fe radical la vas haciendo vida en tu hija Mari Carmen. Te alabo porque ella reconoció su debilidad y limitación pero siguió un dócil instrumento en tus manos. Te alabo porque ella sintió hambre de Justicia, sed de alimento espiritual, pero siguió peregrinando confiada en Vos, sin el pueblo Santo, sin los ejercicios personalizados...Te alabo Padre porque encontró su fortaleza en Vos, en el Cuerpo y Sangre de Cristo, en apertura, escucha y respuesta al Espíritu por quien se dejó conducir. Te alabo Padre porque le permitiste vislumbrar una pequeñita semilla de fe radical en Cuba... Te alabo Padre porque Mari Carmen se ha mantenido fiel, a pesar de las exigencias de la fe radical, ella ha llevado tu Luz...Te alabo Padre por el amor que tienes a cada uno de nosotros, peregrinos de fe radical, porque nos has regalado el Magnificat de Mari Carmen donde vemos TU OBRAR MARAVILLOSO Y LLENO DE AMOR .
Mari Carmen , nuevamente GRACIAS, y cuenta con mi oración. Ànimo en la "nueva tierra" que Dios te envía.
Con cariño en Jesús: Hna. Mónica