lunes, 9 de abril de 2007

Dejarme Hacer por el Señor

Mis queridos hermanos
quiero compartir con mucha alegría lo que va realizando el SEÑOR en mi vida.
Hace mucho tiempo he ido experimentando una gran insignificancia e impotencia me he ido sintiendo como un gusano indefenso totalmente desprotegida desde mi, luego poco a poco esto fue manifestandose en frente a mi propia realidad impotencia de no poder hacer nada desde mi para ayudarme sino sòlo sostenida de la gracia para que Dios siga transformandome, sentìa mi fragilidad de sentir mi orgullo, mi amor propio,mi egoìsmo y mi gran incapacidad de amar desde mi, esto se fue acentuando en determinadas situaciones de sufrimiento de 3 personas concretas una religiosa, un laico y un drogadicto, sus realidades de Vida me dolian mucho, una vida mediocre de la religiosa que sufre y se resiente en su cuerpo y no quiere ser ayudada, una persona sufriendo de esclavitudes al igual que las otras, esto me produjo gran dolor e impotencia de no poderles ayudar desde mi, se me vino abajo toda espectativas humanas, que algo podìa hacer por ellas y me daba cuenta que no podìa hacer nada, que debìa acogerlas, perdonarlas por tanto dolor que me causaban con sus palabras y gestos de menosprecios, que actuaban desde sus heridas y yo me deje sentir en el Señor, mi impotencia frente a la realidad del otro, el dolor por las consecuencias del pecado y reconocìa que esto no le gustaba a mi sensibilidad que estaba actuando con egoìsmo,mi amor propio y mis heridas, que no les amaba como Dios querìa, acogiendo sus realidades y perdonarles, ore todo esto que vivìa e integraba en la fe, comparti con Jesùs su experiencia en el huerto de los Olivos, donde el me compartìa su experiencia de dolor de ser menospresiado y ser condenado injustamente orè junto con èl por estas personas senti el dolor por ellos y luego la mirada amorosa de Dios por ellos y por mi, como èl les acoge asì, me sentìa con una gran impotencia de amar y que desde mi no puedo nada, mas que apoyarme en las experiencias de Jesùs que me enseña a amar y acoger al otro con toda su realidad y acoger mi impotencia de no poder hacer nada y entregaba junto con Jesùs sus vidas al PADRE , experimentaba que Jesùs me enseñaba a compartir mis angustias y tristezas al PADRE, el orar al Padre y enseñarme a Amar como èl ama desde su Corazòn y desde el mìo lleno de egoìsmo y amor propio, sino de ese amor que no tiene interès, siento que el Señor purifica mi amor y me enseña a ser niña que se deja conducir por el Señor y se deja enseñar en lo que es mayor y hoy oraba con la parabola de los talentos donde contemplaba que yo le exigìa al otro el cambio y el Señor me hacia ver que todos tienen diferentes medidas, diferentes cualidades y que yo debo respetar y acoger y valorar sus talentos , las cualidades que el puso en ellas, despuès acogìa en mi los talentos que el me regalò y agradecìa a èl y lo alababa pòr las cualidades que el me va haciendo desarrollar por el reino, con todo esto alababa al PADRE por mi debilidad Humana que ahora la veo como una gracia donde experimento constantemente el Amor inmenso de Dios por mi y su exigencia de quererme semejante a èl, estoy tan contenta y con mucho gozo y paz interior por todo lo que Dios me va regalando para mi crecimiento.
Con respecto a mi proceso de Congregaciòn estoy llendo el fin de semana con los prenovicias, realmente son tantas cosas las que el Señor me va confirmando la vida religiosa, el carisma y la vocaciòn del Amar con el corazòn de JESÙS Y DE MARÌA, voy confirmando la congregaciòn en mi discernimiento, me dedico a mi oración,a leer, el ir integrando mis afectos y emociones sometidas a la razòn por la fe, tambien estoy leyendo el libro, ni santos ni mediocres que me van ayudando mucho, me siento nuevamente tan bien, aceptando y acogiendo como gracia mi debilidad, que voy muriendo a tantas cosas para aprender amar como èl ama, y dejarme hacer y confrontar por el en el dìa a dìa con su palabra donde descubro desde donde me he vivido todo este tiempo, desde mi comodidad,mi autoprotección para no ser dañada cuidando mi amor propio, estando a la defensiva, mi protaginismo, el imponer mi razón y lo que pienso, el que acepten mis ideas en forma impositiva, mi egoísmo, el integrar a mis hermanos en mi vida, y no mirarles como una competencia o amenaza para mi vida, el me va enseñando a amar como él ama, a ver al otro como mi verdadero hermano, estoy en una gran purificación que me da mucha vida. Pido a Dios mucha compasión y que yo sea Paola como él quiere que lo sea.
UNidos en el Amor de Cristo.
Cariños PAOLA.

2 comentarios:

Mónica dijo...

Mi querida hermanita Paola, ¡Cuánto te agradezco tu compartir!, pues ha hecho mucho bien a mi proceso. Me he sentido identificada en varios aspectos: mis egoísmos, protagonismos, sensibilidad..etc. También he agradecido a Dios por el regalo de tu vida. Al orar esta vivencia veo las muchas-variadas gracias que Dios va derramando en tí, el experimentar una gran debilidad, pequeñez, el nada poder desde tí, el dolor grande de esas tres personas que te herían con sus actitudes y ese gran regalo de Jesús de compartir su experiencia de dolor...de enseñarte amar desde EL, a perdonar, a acoger en fe la realidad de estos hermanos heridos. ¡ Qué gracias tan grandes vas recibiendo! y cómo el Señor sigue purificando tus afectos, tu sensibilidad y de ir aprendiendo a amar constantemente con el corazón de Jesús y de María.De valorar los talentos de tus hermanos y los tuyos... Te animo a seguir en esa gran docilidad a la acción del Espíritu y a seguir discerniendo el querer de Dios en tu vida, construyendo su Reino con todo lo que va obrando y derramando en vos. Cuenta con mi oración. Con mucho cariño y agradecimiento te saludo, unidas en el Espíritu de Jesús: Hna. Mónica

Iliana dijo...

Querida Paola: Que alegría leer tu proceso, saber las maravillas que el Señor va obrando,y como él es fiel en nuestra debilidad. Siento esa desición de Dios de hacerte una con su Hijo crucificado. Rezo para que sigas aprendiendo de él, apoyandote en sus vivencias. Que lo puedas descubrir tambien en la pequeñez y debilidad de los que te rodean. Un abrazo. Ili