miércoles, 4 de abril de 2007

Presencia Constante del Señor

Queridos Hermanos:
Durante este último tiempo, el Señor fue muy insistente conmigo dándome oportunidades para acoger sus gracias, regalo precioso y a la vez comprometedor. Fue un sentir muy en lo profundo que la visita de Dios es rechazada en mi persona, volví a tocar sus sentimientos, vivirlos, compartirlos, pero me solté de El por un momento. No estuve en esa persona que hoy me cuesta, me sentí manejada, engañada, quedándome en lo humano. Sin querer negué la obra de Dios en mí, en diferentes ocasiones, que soy un solo cuerpo en el corazón de Cristo porque El ya habita en mi corazón, pero los engaños del enemigo trabajaron mi debilidad.
CREO en la fe radical que no evita los sufrimientos, los rechazos, las humillaciones, porque me quiere semejante a El. Acojo que los sufrimientos a veces van acorde a la fe, pero este tiempo mis sentimientos definieron mi verdad, y no la fe.
Unión de Oraciones
Elena C.

4 comentarios:

Lourdes dijo...

Elena: Grande es el Señor contigo y NO TE DEJA... Me alegro profundamente por este ser insistente de Jesús contigo porque para sólo Él te quiere...
Me uno a tu certeza de que es Él quien te habita y sigo pidiendo por ti para que tu fe no decaiga, hermana.

Carlos dijo...

Elena:
¡Qué alegría más grande me ha proporcionado tu aporte! ¿Quién de nosotros no ha sido engañado y ha tomado un camino que no conduce a la felicidad que sólo se recibe acogiendo en fe el ser uno con el Señor Crucificado y Resucitado? Los sentimientos son malos consejeros en el seguimiento de Jesús. Pero, qué gracia tan grande nos entrega el Señor, cuando en carne propia palpamos que sólo la fe en Jesús nos da la sabiduría para no errar. Se sufre, lo sé, y se sufre mucho cuando dejamos a un lado la gracia entregada del amor gratuito y las humillaciones que este amor conlleva. Yo he pasado por todo lo que vos nos cuentas, y viví la miseria de preferir mis afectos desordenados al querer del Señor para mí. Si el Señor no me hubiera sacado del chiquero, nunca podría alabarlo como ahora lo hago: por su misericordia conmigo y contigo, mi hermana muy amada en Cristo Jesús. Ánimo, Elena, que, aunque seamos infieles, Dios siempre es fiel en su amor primero.
Tu hermano,
Carlos

Beatriz dijo...

Muy querida Elena, me uno a todo lo que Lourdes y Carlos han resonado de tu compartir, lo hago mío y doy gracias al Padre por su amor misericordioso hacia tí.
El te mantiene, hermana, su amor es fiel, no cambia, no depende de nuestro amor. Si dependiera de nuestro amor y de nuestra fidelidad donde estaría yo hoy?
Que el mal espíritu no te haga dudar del amor de nuestro Padre Dios.
Un abrazo grande
Beatriz

Hermelinda dijo...

Querida Elena:
Que linda Pascua de Resurrección!!!
Que gusto mi hermana encontrar tu compartir! Me causa profunda alegría al contemplar el paso de Dios en tu vida, su Obra en ti. Y sale de mi corazón decir al Señor: Gracias Señor por mi Hna. Elena. Te repito que sinceramente me conmueve.
Te recuerdas de nuestro encuentro? allí hemos compartido nuestras vivencias, nos hemos escuchado, nos hemos cuestionado, nos hemos animado…

En aquel entonces he podido captar y acoger contigo tu sentir sin poder hacer nada por ti, pues era un "arreglo" entre vos y el Dios de la Vida. Pero sinceramente suscitó en mí, orar e implorar al Padre su compasión por ti. Es por eso que me causa gozo tu experiencia y ahora lo expreso así: COMO NO CREER EN DIOS !!

Elena, sólo la fe en nuestro Amado nos posibilita acoger al otro como regalo y don de Dios y tirar al tacho nuestros desordenes.

Gracias Elena! Y te recuerdo con mucho cariño que nuestro próximo encuentro es el 6 de mayo, desde las 08.00 hs. Ven, te esperamos.

Un enorme abrazo para ti.
Tu hermana Hermelinda