domingo, 8 de abril de 2007

Celebro como María en mi pequeñez, la grandeza del Señor

Le pedí a María que me ayudara a recorrer estos días de Ejercicios Espirituales y a nombrar todas las gracias que el Señor me regaló.

* Con alegría canto como María y me uno a la alabanza de Jesús al Padre, por sentirme parte de los pequeños que escuchan a Dios.
* Porque en su Misterio insondable me hace formar parte de la CAFA, Comunidad que le cree a Dios.
* Como Abraham el Señor me concede la gracia de creerle y me constituye en su amiga.
* Me maravillo y asombro de tanto cariño de Dios para conmigo; que me llama desde el vientre de mi madre y en sus entrañas pronunció mi nombre y me pone para ser una pequeña luz en el camino de jóvenes, niños de tantos lugares por donde el Señor me envía y enviará mientras viva aquí en la tierra.¨

* Le doy gracias al Padre Dios; porque le pareció bien que exista, desde siempre en su amor de predilección, como hija amada y elegida; para ser parte de su pueblo, para que sea alabanza de su gloria.
* Con paz y confianza entregué al Señor mi historia con sus heridas, abandonos y me abrí a su mirada llena de bondad, desde antes de la creación del mundo, desde toda la eternidad.
* Me sobrecogí ante el abrazo sanador, compasivo y liberador el Padre, de manera tan gratuita y amorosa. Me experimenté muy amada como hija pequeña, débil, cansada, sin defensas, convaleciente, después de una gran batalla en la vida.
* Porque quiso mirar mi condición de rama débil unida a la vid, a Jesús, que me elige como discípula y envía a dar un fruto duradero: “Amar con un amor gratuito”.
* El Señor me libera ayudándome a correr la piedra y me posibilita ver la vida por detrás de las heridas, transformadas en manantial de vida para mi misma y los demás.
* Agradezco al Señor la vida nueva y purificada de toda maldad que me regala al derramar su sangre y agua por su costado abierto.
* Alabo al Señor que por la Fe me hace participar de su Misterio Pascual, me destina a ser suya, me une a El para compartir las pruebas de su seguimiento con paciencia y con la esperanza que infunde en mi corazón por su Espíritu.
* Canto al Señor que me habita, que con su presencia me transforma por dentro: de vasija vieja con agua paso a ser una vasija nueva desbordante de buen vino.
* Alabo al Señor que me da de beber de su agua viva, gratuita y me abre al manantial de vida en su Palabra, que empapa mi tierra y la hace germinar por la alianza de amor que nunca se acabará.
* Gozo en silencio contemplativo por cuanto amor Dios me tiene, que me hace partícipe de su compasión y me une a su vida de obediencia al Padre.
* Agradezco al Señor que por la Fe Radical Amorosa me permite entrar por la puerta y sentirme a salvo, circulando libremente, recibiendo su vida en abundancia y participando de su vida oculta en el Misterio.
* Me siento feliz y dichosa como María, porque Dios desde siempre me ha elegido y desde mi pequeñez; me engrandece con su amor, para que sirva a los hermanos con paz y transmita felicidad a los que sufren, ame gratuitamente como yo soy amada.
Patricia O.

3 comentarios:

Lourdes dijo...

Muy querida Patricia: Doy gracias al Señor contigo por su obrar tan profundo, sanador, maravilloso que nos hace a los demás "cantar de alegría porque el Señor mira siempre la pequeñez de su servidora", así como en María lo vuelve a hacer con todos aquellos que acogen su pequeñez...
Gracias, Pato, por tu compartir, por dejarle al Señor hacer su obra en vos, por saberte emviada a compartir lo que gratuitamente recibiste.
¡¡Cuánto bien nos hace las GRACIAS QUE DIOS REGALA Y SE COMPARTEN!!
Gracias por todo, por dejarle a Él que siga obrando en vos.
Nos vemos pronto
Con inmenso cariño de hermana:
Lourdes

Paola dijo...

Querida Patricia al Leer tu compartir me llena de gozo como Isabel con MARÍA Al ver la obra de Dios en ti, Agradezco al Señor por Su gracia infinita derramada en vos, por la Fe Radical Amorosa que nos permite recibir su vida en abundancia y participar de su vida oculta en el Misterio.
Al Señor le Pareciò bien que exista;esto resuena en mi interior, experimentar al Señor en su Amor de predilecciòn, ùnico y personal y que es El el que se dona en nuestra Vida para hacerla semejante a èl por medio de la gracia de su espìritu, creerle a èl, es la clave de tanta promesa y caminar con fe en lo que Dios nos ha prometido como Marìa seras grande y daras a Luz un Hijo, el ser esa LUZ llena de Vida que mana de nuestro interior de llevar a Cristo VIvo y resucitado en nuestra Vida, que gran Regalo del PADRE hacernos semejantes por participaciòn gozar de su herencia por Amor a nosotros.
Gracias PATY por creerle al Señor y dejar que èl en su Amor infinito toque tu realidad y el la transforme en luz y Alegrìa, experiemento gran Gozo en el Señor, y Adelante con el proyecto de Amor de Dios en Ti.
Unidas en la peregrinaciòn y el Amor de Dios que nos une.
Muchos Cariños de tu compatriota.

Carolina dijo...

Querida Patricia: Alabo al Señor por tantas gracias nombradas, recogidas en tu retiro. Te comparto que para mí las experiencias espirituales de mis retiros, han marcados las etapas de mi conversión y crecimiento en la fe y tantas gracias condensadas de esos días, por la compasión amorosa de Dios, han sido mis vivencias en el día a día, así fui madurando en mi vida de unión cada vez mayor con la Trinidad Santísima que me ha convertido en morada suya por el don de mi fe en Jesús. Pido al Señor que tantas gracias nombradas obren un cambio profundo en tu diario vivir y gracias al don de tu fe en Jesús, tu vida sea: dejar que Jesús viva al Padre dejando obrar en ti y que de Gloria a su nombre. Con todo cariño te abraza en Jesús, Carolina.